En la madrugada del 21 de abril de 1974, un grupo de las Fuerzas Conjuntas de Uruguay, que incluía a efectivos del ejército y la policía, abrió fuego en un pequeño apartamento en el barrio Brazo Oriental, una zona residencial cerca del centro de Montevideo.
En el interior había tres mujeres: la dueña de casa, Silvia Reyes, de 19 años, y dos amigas, Laura Raggio y Diana Maidanik, ambas estudiantes de psicología —Maidanik además, maestra jardinera—, quienes se habrían quedado a estudiar y dormir.
Las tres eran compañeras de militancia en el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros (MLN-T), una guerrilla urbana de izquierda surgida en los años '60, en la que —según sus familiares— se dedicaban a tareas como repartir volantes y "no habían agarrado un arma".
El Estado uruguayo admitió públicamente el jueves (15.06.2023) su responsabilidad por la ejecución extrajudicial de las llamadas "muchachas de abril" y por dos desapariciones forzadas ocurridas durante la dictadura de Uruguay (1973-1985).
Se trata del segundo acto de reconocimiento de actuación estatal ilegítima durante el régimen cívico-militar ordenado a Uruguay por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH).
"Manifiesto el compromiso del Estado de cumplir con la sentencia y dar con el paradero de las víctimas desaparecidas, así como investigar, sancionar y reparar adecuadamente las violaciones de los derechos humanos cometidas en este caso", prometió la vicepresidenta, Beatriz Argimón.
Con textos de Jorge "Pollo" Lopez y Eduardo Da Luz , la comparsa dedica un poco mas de 5 minutos a una fuerte puesta en escena donde se recrea el fusilamiento por parte de los militares a las tres muchachas, luego del relato de Edelweis Loyate.
El homenaje comienza en el minuto 11:26.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://twitter.com/momovirtual1/status/1748832736000070049&partner=&hide_thread=false
Embed - Yambo Kenia - Tercera Etapa - Primera Rueda