Las lagunas, de un azul turquesa impresionante, contrastan con la arena blanca y fina, creando un paisaje surrealista que invita a los visitantes a sumergirse en sus aguas y disfrutar de la serenidad del entorno. Este fenómeno natural, resultado de la combinación de lluvias y fuertes vientos, hace del parque un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y la fotografía.
Desierto de Badain Jaran, China
En el otro lado del mundo, en el norte de China, se extiende el Desierto de Badain Jaran, un lugar igualmente asombroso. Con una extensión de 49 mil kilómetros cuadrados, este desierto alberga las dunas estacionarias más altas del mundo, algunas de hasta 500 metros de altura. Sin embargo, lo que realmente distingue a Badain Jaran son sus más de 144 lagos de agua dulce y salada, dispersos como oasis en medio del árido paisaje.
El origen de estos lagos ha sido un misterio durante mucho tiempo. Estudios hidrogeológicos recientes han revelado que el agua proviene de montañas situadas a más de 350 kilómetros de distancia. Este fenómeno dio lugar al nombre Badain Jaran, que en mongol significa "Lagos Misteriosos". Además de su belleza natural, el desierto ha sido un importante sitio de descubrimientos arqueológicos, incluyendo restos de avestruces y dinosaurios, así como evidencia de actividad humana de hace entre 3 mil y 5 mil años.
Fuente: Con información de National Geographic
