Castro hizo estas declaraciones luego de la megaoperación que las fuerzas de seguridad del estado lanzaron contra la organización criminal Comando Vermelho, que movilizó a alrededor de 2.500 policías en los complejos de Alemao y Penha (norte del municipio de Río).
Durante su discurso, Castro cargó contra el Gobierno federal de Brasil, al que acusó de abandonar al estado en la "guerra" contra el crimen organizado.
"Ya pedimos vehículos blindados al Gobierno federal y todos fueron negados. Espero que esto sirva de ejemplo, porque necesitamos esa integración (...) Esta vez no pedimos ayuda del Gobierno federal porque ya tuvimos tres negativas", aseguró el gobernador.
Durante el operativo se registraron escenarios de guerra con barricadas, bombas e importantes tiroteos.
Castro, que pertenece al Partido Liberal (PL, ultraderecha; sigla que llevó a Jair Bolsonaro a la presidencia entre 2019 y 2023), también se defendió de las acusaciones de "excesos" contra el gobierno del estado, por el nivel de letalidad de la operación.
"Es muy fácil criticar a las fuerzas estaduales y al gobernador cuando el estado (de Río) está, tal vez sí, excediendo sus competencias. Como jamás abandonaremos a la población, si tenemos que excedernos nos excederemos más todavía para proteger a nuestra población", argumentó.
La posición de Castro fue duramente criticada por integrantes del Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quienes -según los medios locales- le reprocharon al jerarca intenciones electorales.
"Esto no es una pelea política, en realidad es un llamado por ayuda", sintetizó Castro.
Reacción del gobierno
La respuesta del Gobierno federal -a lo que las autoridades de Río refieren como la operación más letal de la historia contra el crimen organizado- no se hizo esperar.
El Ministerio de Justicia y Seguridad Público divulgó una nota en la que niega las acusaciones de Castro y afirma estar trabajando de forma integrada con el estado de Río de Janeiro.
"El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública ha atendido con prontitud todas las solicitudes del Gobierno del Estado de Río de Janeiro para el uso de la Fuerza Nacional en el Estado, en apoyo a los órganos de seguridad pública federal y estadual. Desde 2023, fueron 11 solicitudes de renovación de la Fuerza Nacional de Seguridad Pública (FNSP)", afirmó el ministerio.
Las FNSP son contingentes policiales especializados que Brasilia ofrece al resto de los estados de la federación en casos de emergencia.
La cartera, liderada por el ministro Ricardo Lewandowski, afirmó que en lo que va de 2025 se realizaron 178 operaciones especiales en Río; 24 de ellas estuvieron vinculadas al tráfico de drogas y armas.
En esas operaciones se efectuaron 210 detenciones; 60 de ellas relacionadas a casos de tráfico de armas y drogas, agregó el ministerio en la nota.
A la vez, en el mismo período se incautaron un total de "10 toneladas de drogas y 190 armas de fuego, incluyendo 17 fusiles; además fueron incautadas 600 piezas y accesorios para armamentos, "suficientes para armar cerca de 30 fusiles", afirma la cartera.
La Operación Contención, como fue bautizado el operativo, se inició a primera hora de la mañana y buscaba cumplir con 69 mandatos de prisión en 180 direcciones; según el diario Folha de Sao Paulo, seis personas inocentes fueron baleadas.
El diario informó que en el operativo se utilizaron drones, dos helicópteros, 32 vehículos blindados terrestres y 12 vehículos de demolición.