Autoridades brasileñas identificaron en diez estados a los financiadores del asalto a las instituciones democráticas en Brasilia, según informó el ministro de Justicia de Brasil, Flávio Dino.
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"Todavía no es posible distinguir claramente las responsabilidades en cuanto a la financiación. Lo que se puede afirmar plenamente es que hubo financiación. Tenemos una lista de todos los contratistas de autobuses", comunicó Dino.
Además, desde la cartera informaron que todas las personas identificadas "serán llamadas a declarar, porque los buses han sido contratados y no se han destinado a excursiones turísticas".
Para Dino, el gobierno del Distrito Federal tiene responsabilidad en los hechos, ya que la planificación de las fuerzas de seguridad pública de Brasilia fue "determinante" para posibilitar el asalto a los edificios públicos.
En tal sentido, manifestó que sus intenciones de restituir la gestión de la seguridad pública a las autoridades de Brasilia "lo antes posible", aunque ha asegurado que habrá una "revisión" en el cuerpo policial para determinar responsabilidades.
Hay militares retirados entre los detenidos
Unos 1.500 golpistas ya fueron detenidos por el ataque al Congreso, el Planalto y el Supremo Tribunal Federal (STF) , entre estos encontraron a militares retirados de altas jerarquías.
Según informó Página 12, uno de los militares involucrados es el ex director de Logística del ministerio de Salud, general de reserva Ridauto Lúcio Fernandes, que fue funcionario durante la gestión del negacionista Eduardo Pazuello entre julio de 2021 y el último día del gobierno del expresidente Bolsonaro.
Otro participante es el coronel (R) Adriano Camargo Testoni, quien actualmente cumple funciones en el Hospital de las Fuerzas Armadas como asesor de la División de Coordinación Administrativa y Financiera.
También se identificó entre los involucrados a un oficial de la Marina de Guerra, el capitán retirado Vilmar José Fortuna, ex asesor de la cartera de Defensa desde 2013 y en la que ya no trabajaba.