Un acompañamiento sin precedentes
El informe detalla cómo un reducido grupo de asesores se mantuvo cercano al presidente para manejar sus limitaciones. Este equipo desempeñaba un rol de “toma de la mano” para garantizar el manejo adecuado de las apariciones de Biden, especialmente durante viajes o eventos públicos. Esta dependencia fue descrita como algo sin precedentes en comparación con anteriores jefes de Estado.
Para suplir las limitaciones del mandatario, funcionarios asumieron roles que tradicionalmente corresponderían al presidente. Entre ellos destacaron Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional; Steve Ricchetti, consejero principal; y Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional. Incluso, en un intento por mejorar su desempeño en público, se contrató a Jeffrey Katzenberg, especialista en comunicación vocal.
Momentos que expusieron el deterioro
Uno de los puntos más críticos mencionados en el informe fue el impacto del deterioro cognitivo de Biden en eventos importantes. Antes del debate con Donald Trump, el fiscal especial Robert Hur planteó dudas sobre su capacidad para liderar el país, calificándolo como un líder con “limitaciones significativas” en su memoria. A pesar de la preparación previa al debate, Biden no pudo recordar las respuestas ensayadas, según confirmó una fuente cercana al medio.
El debate con Trump marcó un punto de inflexión. La falta de agudeza mental del mandatario no pudo ser ocultada por las estrategias de protección de su equipo, lo que llevó al Partido Demócrata a considerar alternativas para las elecciones presidenciales.