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Un mensaje alto y claro
A través de un mensaje divulgado en sus redes sociales, McBride celebró esta victoria: “¡Gracias, Delaware! Gracias a sus votos y a sus valores, me siento orgullosa de ser su próxima miembro del Congreso. Delaware ha enviado un mensaje alto y claro: debemos ser un país que proteja la libertad reproductiva, que garantice licencias remuneradas y guarderías infantiles asequibles para todas nuestras familias, que garantice que la vivienda y la atención sanitaria estén disponibles para todos y que esta sea una democracia lo suficientemente grande para todos”.
Además, en una entrevista con la cadena CBS, dijo que ella trabajará por la defensa de derechos reproductivos, y que entre sus prioridades se encuentran la atención infantil asequible, la baja médica y familiar remunerada, la vivienda y la atención sanitaria”.
“La voz de Sarah es vital”
Tras conocerse esta victoria, la organización LGBTQ+ Victory Fund, dedicada a promover la representación de personas de la comunidad LGBTQ+ en política, la saludó efusivamente: “La voz de Sarah es vital, y seguirá siendo una incansable defensora de sus electores y su comunidad”.
De acuerdo a los datos que maneja esta organización, al menos 62 candidatos transgénero se postularon este año en todo el país, casi el doble de los 34 registrados en 2020.
Y entre ellos está Mel Manuel, ex profesora de español que se identifica como transgénero y no binaria, quien aspiraba a un escaño en Luisiana. Pero hasta las últimas últimas horas, el recuento de votos indica que Manuel sigue rezagada frente a la votación obtenida por el republicano Steve Scalise.
Panorama tenso
Los derechos de las personas transgénero están en el nudo de las discusiones políticas más tensas en Estados Unidos, con los republicanos en contra y los demócratas a favor.
Mientras que los demócratas defienden de forma amplia los derechos de las personas trans, muchos republicanos critican lo que consideran un riesgo para los derechos de las mujeres biológicas en espacios como baños, prisiones y eventos deportivos.
El propio Trump a echado leña al fuego de la discusión, cuando calificó que la postura demócrata es una “locura de género de izquierda”.
