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Lo que ocurre en Ucrania es solo un detonante para exponer todos los problemas subyacentes que existen en el mundo actual, precisó Antónov en declaraciones publicadas este jueves por el “Perviy Kanal” de la televisión rusa.
El diplomático señaló que hoy se trata de cambios tectónicos en la escena internacional, y en este contexto Washington intenta defender el orden mundial que creó en su propio interés, pero Rusia no está satisfecha con las reglas de juego que le intentan imponer.
Según el embajador ruso, los dos países aún no llegaron al «punto máximo de tensión que existía hace 60 años» (con la entonces Unión Soviética).
Al mismo tiempo, aseguró que mantener el intercambio con Washington en materia de control de armas es importante para Moscú.
«Para nosotros, la importancia de la interacción entre las dos mayores potencias nucleares es evidente, y fomentar la confianza y la seguridad es fundamental en el interés nacional de los pueblos de Rusia, Estados Unidos y el mundo», enfatizó Antónov.
El diplomático cree que Moscú y Washington tendrán que volver al diálogo y a la interacción en la situación actual de retos de seguridad global.