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Con el ministro de Trabajo, Ernesto Murro

Murro: “Hay logros de los que no se habla”

Al finalizar un año cargado de turbulencias, de dificultades y también de muchas realizaciones, Caras y Caretas conversó extensamente con el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, sobre varios temas que no refieren solamente a su cartera, sino que son de interés general de la ciudadanía.

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¿Cómo ve la solución dada finalmente al tema de los llamados “cincuentones” con la ley 19.590?

Nosotros venimos planteando este tema desde los programas de TV de Sonia Breccia, allá por los años 2000, y desde el único debate televisivo que hubo sobre el tema, en el año 1995, con Raquel Daruech, en el entendido de que era un tema principal para el destino social y económico del país.

Más recientemente, en 2013, cuando se aprueba la ley 19.162, que permite la ley de desafiliación de las AFAP de algunos afiliados voluntarios, también planteamos nuevamente esta discusión. Y en ese momento, dicha ley fue un avance indudable, pero no se logró incluir a los llamados “cincuentones”. Antes, en los gobiernos colorados y blancos hubo decretos para -en algunos casos- atender a políticos de ellos que habían votado la ley, pero les afectaba sus derechos jubilatorios personales.

En el año 2015, cuando discutimos el presupuesto quinquenal, volvimos a promover lo que ahora se ha concretado. Es decir, que se permitiera la desafiliación voluntaria de entre 20.000 y 40.000 personas afectadas, lo cual generaría, además de la solución de fondo para estas personas, que estaban razonablemente muy enojadas, ingresos para el Estado de entre 900 millones y 1.500 millones de dólares en poco tiempo, es decir, entre 1,5 y 3 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto [PIB].

Y ello luego se contemplaría, a mediano y largo plazo, en el marco de la concepción que ha tenido nuestro gobierno, y que ha llevado a la práctica de seguir realizando periódicamente reformas graduales, con diálogo social y negociación periódicas, al sistema de protección social, cuya importancia y amplitud social parece ocioso remarcar. Esto además atiende a un sector notoriamente perjudicado en su momento, compuesto por trabajadores de ingresos superiores a la media, que aportaron por ellos, y que es un sector sustancial para el desarrollo del país.

 

(subtítulo)

La necesidad de atender a la clase media

La prueba está en que en sólo seis meses de vigencia de la ley, ya 15.000 personas se han beneficiado y han vuelto al BPS unos 700 millones de dólares, hasta el momento, que ya han disminuido el déficit fiscal en más de un punto porcentual del PIB.

La ley aprobada es una buena solución y que incluye una mejora adicional que a la larga va a atenuar lo que le cobran a los trabajadores por administrar su dinero, la comisión, el importe que disminuye lo que luego le pagan de jubilación por AFAP.

Uruguay, con el gobierno del Frente Amplio, transita el camino de las reformas periódicas, graduales y dialogadas -no las de Urgencia y Presupuesto de blancos y colorados-, y esto se inscribe en lo que viene sucediendo en el mundo, donde un reciente informe de la OIT muestra claramente que de los 30 países que entre 1981 y 2014 crearon AFAP (principalmente en América Latina y Europa Oriental y Eurasia), ya 18 países de esos 30 han revertido total o parcialmente la privatización del dinero de los trabajadores. Esos países son, además de Uruguay, Venezuela (en el año 2000) , Ecuador (2002), Nicaragua (2005), Argentina (2008), Bolivia (2009), Bulgaria (2007), Estonia, Letonia y Lituania (2009), Hungría (2010), Croacia, Macedonia y Polonia (2011), Rusia (2012), Kazajistán (2013), República Checa (2016), y Rumania, en 2017.

 

¿Cuál ha sido a su juicio el desempeño de los Consejos de Salarios, en los que ha quedado demostrado que ha sido la ronda más grande de la historia del país?

De los 181 Consejos de Salarios, retroactivos al 1º de julio, en este momento sólo restan resolver cuatro. Esto ya constituye un éxito.

Deberían reflexionar algunos dirigentes empresariales y políticos que pronosticaron el fracaso de esta negociación. De esos 181, ¿qué tenemos?: 130 ya firmados y 47 que se preacordaron y se están firmando en estos días.

¿Pero cuál es el resultado más importante que queremos destacar? Que tenemos 107 de los 130 ya firmados, o sea, 82% del total, en los que empresarios y trabajadores acordaron conjuntamente. Ese 82% es el mejor ejemplo de la negociación colectiva en Uruguay a través de los Consejos de Salarios, que algunos dirigentes políticos y empresariales quieren reducir y/o eliminar. Bueno, en algunos países, hasta eliminan los ministerios de Trabajo.

Ese 82% de acuerdos entre empresarios y trabajadores incluye 41% (la mitad), en los que ellos acordaron por encima de lo que propuso el gobierno. Otro ejemplo de libertad de negociación. Hasta el momento, solamente hemos tenido que hacer cinco decretos, principalmente de una parte del sector rural, los únicos que se negaron a negociar. O sea, decreto sólo en 3% de los casos. Esto es otra muestra de la fuerza de la negociación colectiva y los Consejos de Salarios.

Estamos analizando los números, pero aproximadamente 150.000 empresas privadas y 1.000.000 de trabajadores han sido representados por sus delegados a través de las cámaras y los sindicatos y beneficiados de esta negociación colectiva.

También tuvimos negociación en el sector público hacia la Rendición de Cuentas y se firmaron importantes convenios en ASSE, INAU, Inisa y nocturnidad de policías (un ejemplo internacional). Y desde 2015 los convenios han ampliado a trabajadores públicos el derecho en BPS a lentes (más de 20.000 nuevos beneficiarios), prótesis y órtesis (más de 3.000) en la educación, ministerios, empresas públicas, judiciales, etc.

Esto es democracia y justicia social. Quiero expresar un especial reconocimiento a los trabajadores del MTSS por el intensísimo trabajo que han desarrollado, así como a los delegados empresariales y sindicales que han colaborado en este proceso histórico.

 

¿Qué está ocurriendo con los cierres de empresas de los que tanto se habla?

Es cierto, y nos duele, nos preocupa y nos ocupa cada empresa que cierra y cada puesto de trabajo que se pierde. Nos duele cada uno de los 150.000 desocupados.

Somos de izquierda y así debe ser. Antes, ahora y siempre.

Ahora bien, también hay algunos dirigentes políticos, algunos dirigentes empresariales, algunos dirigentes supuestamente sociales y algunos supuestos periodistas que sólo informan cuando se cierra una empresa o se pierden puestos de trabajo. Y lo repiten una y otra vez.

Y no lo hacen cuando se crean empresas y puestos de trabajo, y se toman medidas para atender los problemas. Llevamos casi 14 años de gobierno. En los primeros diez años creamos 300.000 puestos de trabajo, se incorporaron 500.000 personas al BPS y 60.000 empresas.

Es un hecho notable, que es analizado como ejemplar a nivel internacional. En los últimos tres años perdimos, lamentablemente, unos 50.000 puestos de trabajo después de haber creado 300.000.

Todos conocemos los cambios en la coyuntura internacional, que tanto influyen en nuestro comportamiento económico.

Países del mundo y de América Latina, a los que les ha pasado lo mismo o peor, quisieron resolver estos problemas con reducción de derechos laborales y sociales. Les fue peor. Tienen más desocupación que nosotros. Tienen más pobreza, más informalidad y menor salario que Uruguay. Y menor crecimiento de la economía.

Uruguay por primera vez en su historia se despega de Argentina y Brasil y tiene 15 años de crecimiento económico ininterrumpido con notoria mejora de derechos laborales y sociales.

Reitero, es cierto que lamentablemente hay empresas que han cerrado y trabajadores que han perdido su trabajo, pero también habría que hablar de lo que se ha creado.

Por ejemplo: las nuevas plantas uruguaya de Bromyros; la francesa de Nordex, para fabricación de vehículos utilitarios, reconociendo la calidad de nuestros trabajadores; la suiza de Nestlé este mes (una de las primeras empresas del mundo que produce reconocidos alimentos como El Águila, El Chaná, Vascolet, Bracafé Nescafé, etc., para la cual colaboramos en negociación colectiva); el primer laboratorio medicinal de cannabis de América Latina adquirido por una canadiense; el Antel Arena, por el cual mucho hicimos, conversando con el presidente, con el Sunca, la empresa Teyma, apoyando a Antel y al MIEM y estamos satisfechos de ello. Y este mismo año, la nueva planta de Air Liquide; el frigorífico Florida; la recuperación de los molinos de Dolores y el cooperativo de Florida; y la nueva planta de Alliance Uruguay, productora de cloro. La tienda internacional H&M, creando más de 300 empleos (colaboramos desde MTSS y BPS en la temporalidad de personal especializado chileno); la construcción parcial de la primera draga en Uruguay por una empresa holandesa (IHC), líder mundial de 400 años de antigüedad que confía en nuestro país para su actividad en la región; la próxima apertura del Hard Rock Cafe en el Buceo. Y hay que sumar una decena de nuevos hoteles de las más importantes cadenas internacionales y el anuncio de inversión de 200 millones de dólares de Coca-Cola en Uruguay en los próximos cinco años

Hace cuatro meses, la cooperativa Coleme, de Melo, estaba fundida y desahuciada; hoy está funcionando, produciendo leche y quesos. Ello se logró con el apoyo del MTSS, ANEP, Inale, Inefop e Inacoop, y gracias a su nueva directiva y sindicato.

En Pili, en Paysandú, está difícil, pero seguimos tratando de ayudar. El BROU prestó 40 millones de dólares. Se aprobaron dos leyes del gobierno para pagar deudas a tamberos y trabajadores, cosa que no ocurrió nunca antes. Ahora hay que conseguir un inversor.

En la Cooperativa Olmos se ha ayudado desde el MTSS y el Ministerio de Industria, Inacoop e Inefop, y el lunes 17 tendremos la licitación. Hay interesados y hay posibilidades de que la cooperativa pueda continuar rediseñándose. Envidrio, encarando problemas, desde setiembre empezó a producir envases de vidrio para importantes empresas.

Estamos también atentos a lo que pueda suceder en Motociclo.

En 2018 se crean unas 140 cooperativas nuevas (y en diez años de su ley, se han triplicado en el país). Esto también es creación de trabajo.

Se exportan 200 millones de dólares más en carne vacuna y 125 millones de dólares más en carne ovina. Hay problemas en el sector lechero que habrá que seguir encarando, pero aumentan las exportaciones lácteas. Ahora se sumarán las exportaciones a Japón tras el acuerdo largamente trabajado y firmado el 1º de diciembre.

Sufrimos la sequía, pero 2018 será récord de productividad y calidad, con mejora en los precios y competitividad en trigo, cebada y colza.

Hay 55 puentes ya construidos o en marcha, una tercera parte de los kilómetros de rutas del país, reparados o nuevos, en estos tres años, obras en casi todos los puertos y mejores posibilidades de navegación por dragados en el río Uruguay y el Río de la Plata.

En 2019 arranca la construcción del ferrocarril de Paso de los Toros a Montevideo y ya se vienen recuperando otras vías férreas, como la de Rivera. La construcción parece retomar fuerza y lleva cuatro meses de crecimiento en trabajadores y horas trabajadas.

Mucho se habla del cierre de empresas. Entre 2006 y 2017, ocurrió que, por ejemplo, las empresas rurales y de industria y comercio aumentaron en 50.000; empresas de construcción hay 1.400 más; empleadores de trabajadoras domésticas hay 25.000 más.

Sin duda que hay sectores en problemas y con ellos estamos dialogando y trabajando, y lo hace incluso el propio presidente de la República.

Como ciudadano, solicitaría que por lo menos las buenas noticias tuvieran los mismos segundos y letras que las otras.

Eso hace a la libertad de expresión, de información, a la profesionalidad periodística y a la democracia.

 

Me decía al principio de la conversación que este ha sido un año con muchos cambios. ¿Cuáles son?

Este año tenemos 150.000 empresas que nuevamente se han beneficiado por ser buenas pagadoras al BPS con una rebaja de 10% en sus aportes jubilatorios de diciembre, más el aguinaldo. Esto antes de nuestro gobierno no se hacía. Significa 10 millones de dólares.

Por otra parte, 5.000 empresas y 55.000 trabajadores ya se han beneficiado de las facilidades de pago de deudas en sólo seis meses de vigencia de la ley 19.632, e hicieron convenios por 67 millones de dólares de los cuales ya pagaron 27 millones.

150.000 jubilados y pensionistas de menores ingresos nuevamente este año reciben el monto denominado “canasta” que también son otros 10 millones de dólares.

15.000 “cincuentones”, como ya dijimos, se han beneficiado de la nueva ley; 4.000 trabajadores judiciales, después de siete años, empezaron a cobrar lo convenido;

1.000 repartidores en moto a domicilio capacitados para proteger mejor su vida y dar más calidad a su trabajo; 120.000 trabajadores y empresarios recibieron capacitaciones de Inefop para mejorar la gestión empresarial y la calidad de la mano de la obra, culminaron estudios primarios y secundarios y se les acreditaron saberes que aprendieron en su vida laboral; pero además se ha resuelto la deuda del gobierno con este organismo y se rebajan los aportes al mismo, patronales y de los trabajadores.

Y en estos años seguimos reduciendo los accidentes de trabajo. Y hay que seguir trabajando en ello de forma multipartita.

Hay un cambio revolucionario en la gestión del ministerio: 100.000 empresas y un millón de trabajadores se incorporaron este año a la Planilla de Trabajo Unificada que reúne información de los Consejos de Salarios, el BPS y la salud. Este es un cambio revolucionario en la gestión del MTSS, de gran beneficio para las empresas por lo que facilita y ahorra, y que ya está generando información importante, de uso en la economía, las relaciones laborales y la vida social en general.

Debemos en este punto agradecer al Colegio de Contadores, a Inefop y a los trabajadores del MTSS y del BPS, que lo hicieron posible.

Hoy, 14 de diciembre, culmina este proceso iniciado hace unos meses; y 92% de todas las empresas privadas y 98% de los trabajadores tienen información actualizada como nunca antes, electrónicamente y en un solo lugar.

 

Tenemos, además, leyes que entran en vigencia: la reforma de la caja militar, para lo cual estamos trabajando con los ministerios de Economía y de Defensa. Es la reforma posible, una reforma necesaria porque lo que falta lo tiene que pagar toda la gente (600 millones de dólares por año).

Tenemos la ley de estímulo al empleo, que comienza el 1º de enero y que establece subsidios al salario de hasta 25% o 40% del mismo, según ingresen nuevos trabajadores, menores o mayores de 45 años, y que también incluye mejoras a la ley de empleo juvenil, promoviendo que los estudiantes puedan trabajar con salario y derechos y seguir estudiando; que pueda haber formación en las propias empresas privadas y otras facilidades para jóvenes, también en pequeñas empresas que ellos generen.

También entra gradualmente en vigencia la ley de garantías laborales para proteger a los trabajadores en casos de empresas que se funden y ellos quedan sin cobrar sus derechos. Ya ha comenzado la recaudación de un mínimo aporte laboral, y desde mediados de 2019, gradualmente podrán ampararse los trabajadores afectados. También entra en vigencia la ley de inclusión laboral de personas con discapacidad.

 

Ministro Murro: ¿una reflexión final?

Simplemente, valorar lo logrado para seguir avanzando colectivamente.

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