El expresidente del Pit-Cnt y actual candidato a liderar la dirección del Frente Amplio (FA), Fernando Pereira, afirmó, en diálogo con Caras y Caretas, que su objetivo es gobernar la fuerza de izquierda sin preferencia por sectores, intentando unir a todas las partes para conformar un “frente más amplio”.
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“Quiero gobernar para todo el Frente Amplio. Lo que supone asumir el papel importante que juegan los actores y las bases del FA en el territorio y en la vida cotidiana”, dijo Pereira a esta revista.
Consultado sobre si creía que en el pasado el presidente del FA pudo haber respondido a algún sector de la fuerza política, afirmó que en esos tiempos “no hubo tantos consensos”.
“Me da la impresión que, para esta etapa, posiblemente para otras no, se precisa un presidente que tenga consensos amplios de los sectores y que se construyan a nivel de la dirección, pero también a nivel de bases”, agregó.
Recordó que él viene de una militancia que está “íntimamente vinculada a la gente”. “Mi zona de influencia política es donde la gente vive, trabaja, ocupa un lugar y que está deseosa de construir o de tener una esperanza junto a otra decena de miles de uruguayos. Construir esa esperanza supone poner mucho oído y pienso”, afirmó.
“Colectivamente tenemos que lograr escuchar a todo el Frente Amplio allí donde late, uno claramente es en la base del FA, otro es en los sectores, pero también los hay en la cultura, en la ciencia, en el arte, en la sociedad y en las comunidades”, reflexionó.
¿Qué cosas le gustaría impulsar en caso de que gane la presidencia del FA?
Sobre todo, la construcción de una perspectiva de futuro que coloque al progresismo, a la izquierda, en 30 años para adelante. Busco un Frente Amplio profundo, que respete a sus bases, que dialogue con su comité, su estructura, sus departamentales, pero que también salga a dialogar con el resto de la sociedad, con los científicos, con los hombres y mujeres de la cultura, del arte, academia, y naturalmente que eso va a implicar un esfuerzo permanente por colocar mucho más oído que palabras. Es decir, construir el futuro implica entre otras cosas abrir el Frente Amplio a la sociedad, que pueda participar, que los militantes tengan una voz que sea plenamente escuchada y que la Huella se llene de cultura. Llenar la Huella de cultura no es solamente que artistas vayan a tocar, sino que también la gente de la cultura pueda ir a opinar, a dar sus visiones, a generar sus puntos de vista y que la dirección del Frente Amplio la pueda tener en cuenta. Colectivamente tenemos que lograr escuchar a todo el Frente Amplio allí donde late, uno claramente es en la base del FA, otro es en los sectores, pero también los hay en la cultura, en la ciencia, en el arte, en la sociedad y en las comunidades.
Usted ha sido cuestionado por dejar el Pit Cnt y apostar por una carrera política. ¿Qué piensa sobre esto?
Como toda crítica, tiene que ser escuchada y analizada y luego pensar y reflexionar para manifestar. Ya he hecho eso. He estado 35 años dentro del movimiento sindical. Es decir, que alguien piense que hice una carrera sindical para luego poder hacer una política, tiene que ser muy visionario hace 35 años, cuando yo tenía apenas 20. Es decir, yo me abracé a la actividad sindical desde muy joven y la transité durante 35 años. Sentí que mi tarea allí estaba culminando, ya lo venía sintiendo, se generó este consenso para que pudiera ser candidato al FA. No pienso en una carrera, pienso en un presidente del FA que construye un frente más frente y más amplio y que eso ayude a construir una plataforma para que nuestros compañeros que vayan a ser candidatos tengan una mejor posibilidad de llegar al gobierno nacional, pero luego poder mirar 25 años más hacia adelante.
Tenemos un proyecto que tiene ideas para el desarrollo productivo, social y democrático, esto implica entonces tener luces para resolver las cuestiones que son del hoy, como por ejemplo para defender a los uruguayos que están sin empleo, que han caído por debajo de la línea de la pobreza, para defender al puerto de esta concesión que claramente no es positiva para Uruguay y para construir políticas alternativas a las que se están aplicando. Además, nuestra tarea central va a estar vinculada a la derogación de los 135 artículos de la LUC. No puede haber ninguna otra tarea más importante de aquí a marzo que ella. Así que esta campaña interna va a estar muy mediada por el plebiscito.
Entonces, política he hecho toda mi vida, lo que no había hecho hasta ahora es política partidaria, salvo en la base del FA, donde milité en tres comités de la coordinadora C, en uno de ellos fui presidente casi una década, de forma tal que me parece que he actuado de acuerdo a lo que toda la vida he manifestado. Nunca he negado mis pertenencias y cualquiera que lee la prensa vieja sabe que me he identificado con la militancia sindical independientemente de los partidos políticos y eso lo he cumplido a raja tabla. Como sabrán, nunca integré la dirección del FA ni del sector al que pertenezco y naturalmente esta invitación me da la impresión que lo que busca es alguien que sea presidente de todo el FA y vamos a internar serlo. Eso es poder poner una especial atención en los compañeros que todos los días tienen los locales abiertos en todo el país para que haya un Frente Amplio vivo en el territorio.
Cuando usted dice que quiere ser presidente de todo el Frente Amplio, ¿cree que en el pasado muchas veces el presidente de la fuerza política respondió a un sector en particular?
No hubo tantos consensos. Me da la impresión que, para esta etapa, posiblemente para otras no, se precisa un presidente que tenga consensos amplios de los sectores y que se construyan a nivel de la dirección, pero también a nivel de bases. No se olvide que yo vengo de una militancia que está íntimamente vinculada a la gente, nosotros participamos de movilizaciones de decenas de miles de trabajadores y de gente asiduamente convocándose para defender el trabajo, el salario, las leyes laborales. Mi zona de influencia política es donde la gente vive, trabaja, ocupa un lugar y que está deseosa de construir o de tener una esperanza junto a otra decena de miles de uruguayos. Construir esa esperanza supone poner mucho oído y pienso. Quiero a gobernar para todo el Frente Amplio. Lo que supone asumir el papel importante que juegan los actores y las bases del FA en el territorio y en la vida cotidiana.
Se viene la campaña contra la LUC y el gobierno ya comenzó a mostrar su estrategia, especialmente centrada en la seguridad. ¿Cuál cree que debería ser la estrategia del FA?
No hay por qué no discutir el tema de seguridad. Cuando fueron al parlamento los especialistas en seguridad, particularmente la Fiscalía General de la Nación, el Instituto de Derecho Nacional, fueron muy críticos con los artículos en seguridad y anunciaron lo que en cierta medida manifestó [Juan Miguel] Petit en el sentido de que las cárceles se han transformado en un lugar donde nadie se puede recuperar, es un tema que viene desde hace tiempo pero que se ha agravado este año por la cantidad de procesamientos, de forma tal que no hay que escapar de la seguridad pero también hay que discutir los derechos a las personas a movilizarse, también hay que hablar de educación.
Hay que discutir los temas vinculados a la inclusión financiera, un trabajador no puede exigir que le paguen por débito, esto aumenta la informalidad en el trabajo o de parte del ingreso. Hay blancos, colorados y votantes de Cabildo Abierto que no están dispuestos a apoyar la LUC y hay que hablar con ellos de igual a igual.
¿Cree que el plebiscito será como unas PASO, un anticipo de las elecciones generales?
No, en absoluto. Es una elección de ciudadanos donde el Frente Amplio juega un papel clave en tanto es uno de los partidos que va a impulsar la derogación de la LUC a partir de votar el sí, creo que todos los uruguayos nos damos cuenta que estamos añorando vivir como en el 2019, un año en el que la gente promovió el cambio.
No hay un rumbo claro de las políticas del gobierno y lo que está pasando es que 100.000 uruguayos cayeron por debajo de la línea de la pobreza, otros uruguayos concentraron 6.800 millones de dólares, esto es distribución desigual de los ingresos, la situación que están viviendo miles de uruguayos alimentándose en ollas populares es dramática. A pesar de esto, la gente va a laudar sencillamente por una ley. En esos artículos, que están siendo observados, naturalmente va a haber un debate público y una decisión de la ciudadanía. Luego la elección es otro cantar que se va a definir por muchos motivos, pero no exclusivamente por el referéndum, que se lauda sobre una ley. Luego podrá decidir por otros factores, pero esto va a ser un debate que se va a dar durante todo el período y que la elección será síntesis.
Estoy convencido que Uruguay ya empezó a procesar una lógica de cambio y que el modelo que eligió para gobernar entre 2020 y 2025 probablemente no construya la mayoría que conquistó la elección pasada. El FA tiene que construir esa mayoría electoral que le permita ganar la elección, pero no va a ser por el referéndum, aunque lo gane o lo pierda. Electoralmente es un dato importante, pero es un dato más.
Pereira dice que no está pensando en ocupar otros cargos políticos
En un futuro, ¿podría pensar en ocupar otros cargos políticos? ¿Le gustaría ser candidato a la presidencia?
No lo tengo en la perspectiva, pero para estar cinco años en el FA, que es el tiempo por el que se elige al presidente, trataré de hacerlo de forma tal de que cuando termine el mandato tenga la conformidad de que se construyó los pasos adecuados para el Frente Amplio de los próximos 30 años. Si dimos esos pasos, nuestra tarea habrá sido cumplida colectivamente junto con otros, si no lo dimos, habremos fracasado. Estoy convencido que cuando los colectivos se ponen a trabajar, se armonizan las ideas, se piensa sin sectorismos, hay un proyecto en el que todos se sienten parte.
Pereira acepta las críticas, pero sostiene que apuesta por la paridad y el recambio generacional
Usted dijo que su vice sería una mujer menor de 40 años y fue criticado por algunos sectores. ¿Qué piensa sobre esto?
Tal vez no lo haya podido expresar de la mejor manera, pero claramente hay que apostar a la paridad. Yo acepto la crítica si algo no lo expresé bien, si se pudo haber mal interpretado o si yo simplemente no lo dije bien. No hay que olvidar que todos nosotros, sobre todo mi generación, está intentando cambiar su masculinidad, pero eso no se hace un día para otro y probablemente tenga esos desaciertos y muchos otros, pero tengo la intención clara de que tiene que haber un recambio generacional e ir rumbo a la paridad y eso son acciones concretas. Acciones concretas fueron las que se llevaron dentro del Pit-Cnt, de un secretariado que apenas tenía participación femenina, pasó a estar integrado por cinco titulares y dos compañeras, osea siete mujeres en el secretariado y dos alternas, eso es una acción concreta de trabajo que va en dirección a la paridad.
Ojalá en el FA tengamos una paridad en la que se democratice la participación de hombres y mujeres y donde el recambio generacional juega un papel importante. Eso no está solo vinculado a mujeres, sino que hay que llenar de jóvenes el FA. Llenar de jóvenes el FA no es sacar a nadie, nadie piensa a la fuerza política sin los veteranos, sin esas militancias que están desde el 70 dentro de los comités, pero si queremos tener Frente Amplio del futuro, tenemos que abrir las puertas y las ventanas para que soplen nuevos vientos, que son jóvenes varones y mujeres que quieren transformar la sociedad, que tienen ideas, métodos y formas de actuar diferentes a las nuestras pero que son compatibles con el Frente Amplio del futuro. Esa fue mi idea, las críticas son recibidas siempre de buena manera, pero no es que no tengo un objetivo clavo. Mi objetivo es escuchar los jóvenes donde están, voy a ir a todo el país, a todas las coordinadoras, voy a hablar con los jóvenes que estén organizados para intentar que ese movimiento juvenil irrumpa en el FA con sus ideas, con su forma de pensar, con su bandera y de alguna manera se construya un frente más amplio.