Este martes, 6 de junio, se discutió en el plenario del Senado las modificaciones al Código Penal en relación a los delitos ambientales; el proyecto de ley elaborado por la Comisión de Ambiente recibió su aprobación definitiva por unanimidad.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
El próximo paso será la discusión de la norma en la Cámara de Representantes en los próximos días, que, de resultar favorable, marcará un precedente en la historia legislativa uruguaya en cuanto a las medidas de protección de los ecosistemas locales.
En la norma se estipulan penas para los delitos por contaminación del aire, contaminación de aguas, contaminación de suelo, contaminación por residuos o sustancias, introducción de desechos peligrosos, falsedad y obstaculización de la fiscalización ambiental, entre otros.
Este proyecto se aprobó en el Senado con los votos del Frente Amplio, del Partido Colorado y solo una fracción del Partido Nacional. Además de varias ausencias oficialistas en la sesión, lo que llamó poderosamente la atención fue que la bancada de Cabildo Abierto votó de forma negativa, y el tono de las declaraciones de algunos legisladores.
Guillemo Domenech, senador y figura notoria de este sector de derecha, fustigó el proyecto, lo trató de "defectuoso", y, entre otras cosas, afirmó que se propone una "criminalización indiscriminada de conductas". "Dentro de poco vamos a penalizar penalmente las infracciones de tránsito; no sé si no son más graves todavía que los supuestos daños ambientales", sentenció.
Otro legislador que se manifestó en contra fue el nacionalista Sebastián Da Silva, quien dijo estar preocupado por incorporar estos delitos al Código Penal, y auguró, fiel a su estilo, que "por una impericia del tiempo o el manejo de alguna fertilización, algún productor rural puede terminar preso si cae en manos de algún burócrata fanatizado".
No obstante, el proyecto sigue su curso de aprobación y ahora resta esperar su tratamiento en Diputados.