El sábado el presidente Luis Lacalle Pou invitó a todos a la inauguración del Hospital del Cerro. Y este lunes allí se concentraron los vecinos. El acto transcurrió en un clima tenso de principio a fin, lo que incluso derivó en la intervención de efectivos policiales.
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“Con un hospitalito no se tapa la corrupción, la mafia ni el hambre de los niños”, “gobierno corrupto” y “renuncias, no destitución” fueron algunos de los mensajes que los manifestantes le hicieron sentir al presidente.
El discurso de Lacalle Pou duró varios minutos y, con tono de campaña, confrontó a los manifestantes que se hicieron presentes con cánticos y carteles alusivos a la crisis política que atravesó el gobierno en los últimos días, tras conocerse nuevos detalles de la entrega del pasaporte a Sebastián Marset.
“Creo que en el fondo estamos todos contentos de que el Cerro tiene un hospital, porque van a ir los hijos de los que están más acá”, dijo en alusión a los presentes más cercanos al estrado, “y van a estar los hijos de los que trajeron los carteles, y los van a atender como merecen, porque es para todos”, apuntó.
“Algunos están con ganas de que termine el gobierno”, fustigó Lacalle Pou antes de recordar que quedan “481 días de gobierno”. “¿Y saben qué? Cuando pasen esos 481 días, ¿saben a dónde voy a volver yo? Acá, al Cerro, como siempre vine”, sostuvo. El presidente hizo varias menciones a su vínculo con el Cerro, señalando que lo visita con frecuencia y que el hospital fue una de sus prioridades de campaña. Por esto, sostuvo que el de hoy fue “un día particularmente importante para todo el equipo de gobierno”.
La inauguración se retrasó varios meses, ya que en un principio estaba prevista para agosto. El Hospital del Cerro cuenta con cuatro pisos, tiene 30 camas y dos blocks quirúrgicos.
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