Consultado por otra de las críticas del gremio—que denunciaron un gasto de 1.500 millones de pesos en 57 cargos de confianza—gasto en cargos de confianza, Irigoin expresó: “Es un disparate y es una cuenta que está mal”. Explicó que se está comparando el costo acumulado de un quinquenio con el incremento salarial de un solo año, lo que, según dijo, tiene una “intencionalidad no correcta”.
Sobre la demanda de un aumento de $10.000 el secretario comunal dijo que "es un planteo descolgado de la realidad", asegurando que no la van a encontrar “en ninguna negociación colectiva, pública o privada de todos los países”. Señaló que otorgar un ajuste de ese monto implicaría “hacer peligrar los fondos públicos, disminuir los servicios” y “aumentar de forma desproporcional en comparación a lo que está negociando el resto del sistema público y privado”.
"La Intendencia no funciona para pagar salarios, paga salarios para funcionar", dijo señalando que, además de atender a sus trabajadores, "el objetivo y la obligación principal de cualquier gobierno departamental es dar servicios a la ciudadanía".
El jerarca aseguró que la intención es que "los salarios crezcan lo más posible", consideró que la propuesta del Ejecutivo es “más que potable” y señaló que ha permitido mejorar las condiciones laborales desde 2025.
Con respecto a cómo sigue la negociación, sostuvo que aún no han recibido respuesta al planteo presentado: “No estamos en situación de negociación, hemos transmitido y no hemos tenido una devolución”.