El Partido Socialista, organizó un encuentro en el Palacio Legislativo para discutir la posibilidad de que Uruguay pueda apostar a reducir la jornada laboral de ocho horas.
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El encuentro se realizó este jueves en el Palacio Legislativo, encabezado por el senador José Nunes, y distintos expertos, legisladores, dirigentes y autoridades discutieron sobre la posibilidad de que Uruguay pueda llevar adelante esta medida.
Contó con la presencia del ministro de Trabajo, Pablo Mieres; el presidente del Pit Cnt, Marcelo Abdala; la presidenta de la Federación de Cooperativas de Producción, Marisol Fuentes; el presidente de la Confederación de Cámaras Empresariales, Diego O´Neill; y la integrante de la Intersocial Feminista, Alma Espino. Intervinieron también los abogados y especialistas en Derecho Laboral de la Udelar, Bruno Sande y Mariana Fernández.
Marcelo Abdala, destacó la iniciativa y aseguró que es una buena instancia “para reflexionar” sobre el tema.
“Estoy convencido de que la reducción de la jornada laboral es una cuestión que trasciende las relaciones laborales y son bastante amplias las consecuencias que puede tener este debate”, recalcó.
El presidente del Pit-Cnt señaló que “obviamente todo el mundo va a defender con ahínco sus intereses, pero lo importante es tratar de desarrollar una visión de conjunto que sea en beneficio de las grandes mayorías de la sociedad”, y admitió, que el debate “es complejo”, dado que existen “distintas perspectivas que son válidas”.
Se trata, de “un proyecto de carácter estratégico a largo plazo, el que servirá para refundar ese carácter avanzado de legislación en nuestro país”.
“La idea de la reducción del tiempo de trabajo no es una reivindicación subjetiva del movimiento obrero, sino que es el funcionamiento objetivo del propio sistema capitalista. Porque permanentemente por la vía de una mayor productividad se está presionando a la disminución del tiempo de trabajo necesario invertido en la producción de una mercancía. Esto tiene que ver con la potencialidad de mejorar la calidad de vida de la población. Si la acelerada transformación electrónica y de la productividad social del trabajo no son acompañadas por una reducción de la duración del tiempo de trabajo, lo que se exacerba son los procesos de distribución regresiva y anti igualitaria de la riqueza producida”, opinó.
Para Abdala, si en una jornada de trabajo de 8 horas aumenta la productividad y no se reduce el tiempo de trabajo, “esa mayor productividad va a parar a la rentabilidad empresarial, pero no a una mejora en la calidad de vida de los trabajadores”.