Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Política

Causa del pueblo

Uruguay, parte de esa parte del mundo que lucha contra la tragedia palestina

Cuando no se puede andar con eufemismos ni ser cómplices: en Uruguay el pueblo se levanta y reclama romper relaciones con el estado genocida de Israel.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

Toqué alguna otra puerta pero Gaza parecía cerrada con candado. La llave se la había tragado Israel y estaba bombardeando a los palestinos atrapados en su interior. Bombardeándolos otra vez: en una intensificación de su política de lento estrangulamiento ahora les lanzaba toneladas de muerte. Era como si se empeñara en limpiar el terreno antes de abrir la cárcel. Como si fuera necesario cerrar la entrada para que nadie viera el horror de la vida y de la muerte entre sus muros. Iba a ser tarde después, pensé, cuando ya no quedara nada, cuando ya no hubiera nadie para contar cómo había sido resistir ahí dentro. Volverse palestina - Lina Meruane Escritora chileno-palestina Toqué alguna otra puerta pero Gaza parecía cerrada con candado. La llave se la había tragado Israel y estaba bombardeando a los palestinos atrapados en su interior. Bombardeándolos otra vez: en una intensificación de su política de lento estrangulamiento ahora les lanzaba toneladas de muerte. Era como si se empeñara en limpiar el terreno antes de abrir la cárcel. Como si fuera necesario cerrar la entrada para que nadie viera el horror de la vida y de la muerte entre sus muros. Iba a ser tarde después, pensé, cuando ya no quedara nada, cuando ya no hubiera nadie para contar cómo había sido resistir ahí dentro. Volverse palestina - Lina Meruane Escritora chileno-palestina

Uruguay teñido de rojo, verde, blanco y negro

Desde temprano, los ómnibus llegaban al Centro de Montevideo desde distintos puntos del país con pasajeros que llevaban banderas enrolladas, pancartas improvisadas, carteles con consignas y todo tipo de propaganda alusiva en soporte al pueblo palestino, en contra de la limpieza étnica que lleva adelante el gobierno supremacista de Israel, con la complicidad de Estados Unidos y Europa.

Cuando la marcha comenzó a moverse, el ritmo lo marcaban los tambores y las gargantas.

“¡No es guerra, es genocidio!”

“¡Estado sionista, vos sos el terrorista!”

"¡A romper a romper relación con Israel!"

WhatsApp Image 2025-10-09 at 7.41.56 PM
Movilización por Palestina. Fotografía: Meri Parrado

Movilización por Palestina. Fotografía: Meri Parrado

Entre las columnas se veían familias enteras, jóvenes con keffiyehs, docentes, militantes sindicales y personas mayores que marchaban con paso lento, apoyadas en bastones.

Pegatinas con la bandera palestina cubrían los postes de la avenida, muchos pegados por militantes de base del Frente Amplio que han denunciado históricamente y más aún, los últimos 24 meses, el genocidio; mientras el gobierno, del mismo color político, se ha mostrado dubitativo y ha preferido los eufemismos. De todas formas la presencia de la vicepresidenta de Uruguay, Carolina Cosse, fue enfática al condenar las acciones de Israel, y su presencia en la marcha marcó un hito en el apoyo gubernamental a la causa, y acercó la posición del gobierno a la de su fuerza política.

“La indignación de la gente está que explota”

“Está impresionante. Todavía no tenemos dimensión del volumen”, dijo Alejandra Bittencourt, vocera de la Coordinadora por Palestina, al ser consultada por Caras&Caretas sobre la convocatoria.

“Hemos trabajado muchísimo, recorriendo comités de base, sindicatos y clubes de barrio para que la gente entienda lo que está pasando". De todos modos, atribuyó la masividad a un factor que supera la militancia organizada: “No nos podemos adjudicar el mérito solo de esto. Las imágenes son tan crudas, el genocidio es tan brutal, que la indignación de la gente está que explota”, afirmó.

Según explicó, la organización de la marcha contó con la participación de múltiples colectivos sociales, culturales y políticos. “Algunas organizaciones van a todos los plenarios, otras colaboran desde sus lugares. Pero todas forman parte”, señaló.

Una multitud

Ya en Plaza Independencia, la multitud escuchó una proclama extensa que denunciaba la continuidad de la ocupación israelí ilegal y reclamaba el fin del bloqueo a Gaza.

Antes, se leyó una carta enviada por la madre de una de las uruguayas que integró la flotilla Sumud Global, interceptada semanas atrás cuando intentaba llevar ayuda humanitaria.

Desde el escenario, la voz de Alejandra presentó al colectivo Judíos y Judías Uruguayos contra el Sionismo, cuya intervención se transformó en uno de los momentos más poderosos de la jornada.

“No en nuestro nombre”

Subieron al escenario Mónica Wodzislawski, Alejandro Jorysz y Alma Cohn, tres de los más de cien integrantes del colectivo. “No se puede invocar la amistad entre países cuando se está exterminando a un pueblo entero”, dijeron. “El sionismo no representa al judaísmo. El sionismo es una ideología racista y supremacista que está perpetrando un genocidio”.

“Somos descendientes de quienes sufrieron el exterminio —agregaron desde el colectivo—, y por eso mismo no podemos callar frente al genocidio del pueblo palestino. No en nuestro nombre”.

La proclama final, leída por Christian Mirza, volvió sobre ese eje y fue recibida con cánticos y aplausos “Los objetivos de Israel no son desmantelar una organización, sino borrar a un pueblo, su memoria y su existencia. Quienes gobiernan Israel deben ser juzgados por crímenes contra la humanidad. El silencio es complicidad”.

Acá le decimos bien fuerte a ese pueblo heroico, en Gaza, en Cisjordania, en los campos de refugiados. Vuestra lucha es nuestra. No están solos, pueblo palestino. Acá está el pueblo uruguayo junto a ustedes. Durante estos dos años nos hemos enfrentado a través de imágenes diarias, a una arremetida brutal, sin precedentes en este siglo, tanto por su magnitud como por la. Naturaleza de sus objetivos. Estos objetivos no son, como dicen, desmantelar. Una organización, sino que apuntan a borrar. A un pueblo, a borrar su existencia y su memoria. El dolor no se mide ni se pesa, pero nos enseña que el horror y el luto no paralizan a un pueblo que quiere romper sus cadenas. Palestina se ha convertido en la nacionalidad de la humanidad. Y Gaza, en la capital del mundo. Cuantificar el genocidio ya no es posible. En Gaza no se pueden contar las muertes. Las cifras oficiales hablan de más de 67.000 personas asesinadas. Pero estos números solo indican la cantidad de muertes registradas. No incluye a las personas desaparecidas bajo escombros, ni a los cadáveres en fosas comunes. Investigadores y funcionarios de la ONU han elevado la cifra de muertos a cientos de millas. Acá le decimos bien fuerte a ese pueblo heroico, en Gaza, en Cisjordania, en los campos de refugiados. Vuestra lucha es nuestra. No están solos, pueblo palestino. Acá está el pueblo uruguayo junto a ustedes. Durante estos dos años nos hemos enfrentado a través de imágenes diarias, a una arremetida brutal, sin precedentes en este siglo, tanto por su magnitud como por la. Naturaleza de sus objetivos. Estos objetivos no son, como dicen, desmantelar. Una organización, sino que apuntan a borrar. A un pueblo, a borrar su existencia y su memoria. El dolor no se mide ni se pesa, pero nos enseña que el horror y el luto no paralizan a un pueblo que quiere romper sus cadenas. Palestina se ha convertido en la nacionalidad de la humanidad. Y Gaza, en la capital del mundo. Cuantificar el genocidio ya no es posible. En Gaza no se pueden contar las muertes. Las cifras oficiales hablan de más de 67.000 personas asesinadas. Pero estos números solo indican la cantidad de muertes registradas. No incluye a las personas desaparecidas bajo escombros, ni a los cadáveres en fosas comunes. Investigadores y funcionarios de la ONU han elevado la cifra de muertos a cientos de millas.

Dejá tu comentario