Las expectativas de Cabildo Abierto se vieron notoriamente eclipsadas en estas elecciones nacionales, Guido Manini Ríos, tomó la palabra para asumir la responsabilidad de los resultados obtenidos. A medida que se revelan las proyecciones de Usina de Percepción Ciudadana, que otorgan al partido un 2,4% de apoyo en comparación con el 11,4% de 2019, Manini expresó su descontento y reflexionó sobre el desempeño del partido.
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Durante su intervención, Manini se dirigió a sus votantes y, especialmente, a los militantes que trabajaron en la campaña. Reconoció que su expectativa de votación era más alta, considerando el esfuerzo realizado en recorridas por todo el país, donde llevaron sus propuestas de seguridad pública, cambios en la política de drogas, defensa del trabajo nacional, apoyo a los deudores, y defensa de la familia y la vida.
"Yo soy el responsable de la mala votación de Cabildo", afirmó.
El líder de Cabildo Abierto destacó que, a pesar de los esfuerzos, el escenario actual es diferente al de hace cinco años. En 2019, Cabildo Abierto emergía como una novedad en el panorama político nacional, atrayendo a votantes descontentos con el sistema. Sin embargo, ahora, a su juicio, el partido ya no cuenta con esa misma novedad, aunque sigue planteando temas que muchos consideran tabú en la política uruguaya.
Manini no escatimó en autocrítica y afirmó que se siente responsable por no haber logrado conectar con el electorado de la misma manera que lo hizo en su momento de auge. La realidad de la votación refleja un cambio en la percepción pública y en las expectativas de los votantes, un desafío que el partido deberá enfrentar en los próximos años si aspira a recuperar su relevancia y apoyo popular.