Desprotección
La jerarca agregó que, mientras la demanda de atención aumentó —con un incremento del 66 % en el número de menores de edad que ingresan al sistema como víctimas de violencia—, el Inau se encuentra en una situación de sobrepoblación en sus centros de atención las 24 horas y enfrenta serios déficits de recursos humanos. "Ese incremento del 66 % de gurises víctimas de violencia, ¿quién los está atendiendo? Entonces, se empiezan a generar situaciones de desprotección, cuando ingresan al Inau para que el estado los proteja".
A esta situación, prosiguió la jerarca, se suma que en muchos casos los equipos, aunque comprometidos, carecen de los conocimientos necesarios para responder adecuadamente a las demandas de la tarea, lo que "agudiza y agrava la situación”.
La directora también aludió a los indicadores que exhiben la gravedad del problema, aunque admitió que los números no siempre reflejan “la cruda realidad”. Para ilustrarlo, mencionó los informes y denuncias emitidos por la Institución Nacional de Derechos Humanos (Inddhh), los cuales incluyen recomendaciones específicas para el Inau. Sin embargo, Argenzio denunció que “no se cumplen las recomendaciones”, lo cual pone de manifiesto, según expresó, una situación de desprotección hacia los menores que deberían ser atendidos por el Estado.
Embed - Pasaron Cosas viernes 8 de noviembre 2024