El Ejército Nacional destruyó este jueves, mediante fundición, un total de 2.924 armas (3.365 kg) en la metalúrgica Gerdau, las cuales cumplieron con los plazos judiciales establecidos para su destrucción, tras ser recepcionadas durante el año a través del Registro Nacional de Armas.
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El Servicio de Material y Armamento las mantuvo en su depósito judicial, las desmanteló y clasificó, para luego enviarlas a su disposición final.
El arsenal contenía armas cortas y largas. Entre ellas, varias estaban en desuso, otras habían sido confiscadas por el Poder Judicial y algunas entregadas voluntariamente por la población.
La metalúrgica que se encarga de fundir armas y reciclar el acero
Con 123 años de historia, Gerdau es una de las empresas líderes en el segmento de aceros largos en el continente y una de las principales proveedoras de aceros especiales del mundo.
Además, es una de las principales empresas recicladoras de chatarra ferrosa de América Latina. Gerdau transforma anualmente millones de toneladas de chatarra en productos de acero, destinados al mercado de la construcción civil, la industria automotriz, energética, entre otros.
En Uruguay se procesa el 99% de la chatarra recuperada en todo el territorio del país.
El uso de la chatarra en el proceso productivo contribuye directamente con la economía circular, incidiendo directamente en la reducción de la energía utilizada en el proceso industrial, ya que la producción de acero a partir de la transformación de la chatarra consume un nivel de energía significativamente menor.
Se evita además el enterramiento de miles de toneladas de chatarra, disminuyendo así las explotaciones de recursos naturales, recuperando el valor económico de los residuos y potenciando así la cadena de valor del reciclaje de chatarra.