Bajo la consigna "Ni un derecho menos, basta de retrocesos" millares de mujeres marcharon en Montevideo y diversas localidades del interior en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, cuando la violencia y los femicidios crecen en nuestro país. Los colectivos convocantes reclamaron políticas de Estado para vencer discriminaciones y un sistema de Justicia acorde.
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Pero las mujeres adultas no son las únicas que sufren violencia, ya que en el 50% de los casos de femicidio y situaciones de tentativa de femicidio se vieron involucrados niños, niñas y adolescentes, según un relevamiento realizado por la Unidad de Víctimas y Testigos de la Físcalía.
“Esos niños han presenciado a lo largo de su vida situaciones de violencia que muchas veces en su casa aprenden como que es natural esa forma de relacionarse”, dijo Mariela Solari, directora de esa repartición a Subrayado.
Solari se refirió a la experiencia traumatizante que le significan a los niños presenciar los hechos de violencia y las alteraciones posteriores que eso causa en su vida cotidiana, como la alimentación y el sueño. El costo emocional y de más largo aliento de trabajar con niños que fueron testigos del asesinato de su madre, que requiere una mayor cantidad de recursos técnicos para su apoyo.
En esos casos, es necesario reconstruir una trama de adultos para que puedan hacerlos sentir seguros, valiosos, queridos y que eso no volverá a sucederle en ese ámbito.
“Lleva un tiempo poder recuperarse de una situación extremadamente violenta”, afirmó Solari. Destacó la importancia de acompañar a las víctimas a transitar el duelo y el dolor de la muerte de su madre y la prisión o en algunos casos el suicidio de su padre.
FEMICIDIOS
Mariela Solari también analizó las situaciones de violencia a las que son sometidas las mujeres. “Las situaciones de violencia son una de las manifestaciones de esas inequidades y desigualdades que las mujeres viven a lo largo de su vida”, afirmó la directora de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía.
Solari dijo que la tendencia es a pensar en violencia, como violencia física, pero los números indican que un porcentaje importante de las denuncias refieren a violencia psicológica, al hostigamiento, control y sometimiento. “Las situaciones cuando llegan a la justicia penal es cuando ya llegamos como sociedad tarde y mal”, sostuvo.
Señaló la importancia que los entornos cercanos a mujeres y hombres construyan herramientas emocionales para llegar antes, para advertir situaciones abusivas en los vínculos que buscan el sometimiento y el control. Habló de deconstruir los estereotipos creados por la sociedad de cómo ser buenas mujeres y buenos hombres.
La mayoría de los femicidios que ocurren en el país son femicidios íntimos, en el marco de una relación, que se da en una escalada de violencia que termina en la muerte de la mujer. Pero, también ocurren femicidios en otros contextos como el microtráfico y el crimen organizado, donde se utiliza a las mujeres como forma de venganza