Desde hace 15 años la Intendencia de Montevideo (IM) trabaja en temas de género y diversidad, explicó el titular de la Secretaría de la Diversidad de la comuna, Sergio Miranda.
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Recordó que “surgió como una necesidad”. “Estamos en un momento de emergencia social y estamos trabajando mucho. Y la demanda es creciente”, subrayó. Y agregó que “el tema ha estado en la agenda de la Intendencia de Montevideo desde hace por lo menos 10 años. En realidad unos 15 años. Al principio se trabajó en las temáticas de género. Luego el avance de los tiempos y la propia gestión, y la experiencia, llevaron a que género se transformara en la División de Asesoría por la Igualdad de Género. Es una repartición que integra el gabinete del gobierno de Montevideo. Posteriormente se crea la Secretaría de Diversidad en el ámbito del Departamento de Desarrollo Social. La conformación de esta secretaría se realiza en la gestión pasada”.
“Había una necesidad de tener una unidad en que la intendencia pudiera abordar los temas referidos a la población Lgbtiq+ en todos los aspectos. Como un lugar de escucha y también de generación de políticas públicas dirigidas a esta población”, precisó.
Precisó Miranda que en esos 15 años “el país vivió el proceso de creación de un marco legislativo, que algunos llamaron la agenda de derechos, que permitió aprobar estas leyes dirigidas a crear el matrimonio igualitario, la unión concubinaria, la reproducción asistida, adopción por familias homoparentales y ley integral para personas trans. En paralelo Montevideo acompañó ese proceso, por ejemplo con la creación de esta secretaría”.
Miranda recordó que el trabajo de la secretaría se vio complicado por la llegada de la pandemia de covid-19, la que dejó en evidencia inequidades y vulnerabilidades ya existentes. “Cuando nosotros ingresamos en 2020 se vino la pandemia. Fue un momento complejo. Tuvimos a Montevideo en rojo durante unos meses. Con una situación social, económica, política en general de mucha emergencia de toda la gestión de la comuna. Ahí la secretaría tuvo mucho trabajo porque la población asistida por ella es una población, que ya venía vulnerada, como otras, y lo que hizo la pandemia fue poner en evidencia las vulnerabilidades que ya existían. En el caso de la población trans, por ejemplo, son personas que por muchos motivos estaban en un marco de supervivencia solo con trabajo sexual. La pandemia fue como una llave de luz que se apagó. Esta gente quedó, de un momento para otro, sin ingresos, y no solo con la supervivencia propia porque muchas de estas personas, sobre todo trabajadoras trans tienen personas a su cargo, ya sean niños como personas mayores. Fue una situación de mucha emergencia y rápidamente hubo que atajar el tema del trabajo y la salud”.
En este sentido destacó que en el marco del Plan ABC, se creó el programa Oportunidad Laboral, por el cual han ingresado 200 personas trans.
En paralelo a eso la Secretaría de la Diversidad “diseña, crea y pone en funcionamiento un programa estratégico de capacitación laboral para personas trans y no binarias porque surge el planteo, la solicitud, el reclamo, de los colectivos de personas no binarias. Reclaman básicamente su derecho a existir porque el Estado no reconoce la identidad no binaria. Todo lo público es binario. Cualquier formulario, cualquier inscripción, se es hombre o mujer. Bueno, las personas no binarias tiene una identidad que no son ni lo uno ni lo otro. La identidad no binaria atraviesa toda la historia de la humanidad, no es un fenómeno nuevo. Sucede que estamos viviendo un momento muy revolucionario en ese sentido, en el que hay realmente mucha gente, y sobre todo personas muy jóvenes, que manifiestan una identidad que es no binaria. Eso es una realidad y nosotros como Estado no podemos hacer de cuenta que no existe. Y más cuando hay planteos formales de un sector de la población que tiene derecho, básicamente, a ser”.
Como primera acción en el ámbito laboral, indicó, se elaboró un plan con oportunidades laborales para personas trans y no binarias, que “es un programa que desarrollamos la Secretaría de la Diversidad junto con la Secretaría de la Economía Solidaria. Es un programa de capacitación en tres niveles. Luego del tercer nivel surgieron 10 proyectos que la intendencia va a acompañar desde el punto logístico y técnico, y quizás con una alguna pequeña inyección de capital”.
En simultáneo, agregó, el otro eje de la emergencia era la salud. “Ahí lo que hicimos, en conjunto con la División Salud, continuar desarrollando un trabajo que se había iniciado en la gestión anterior, que era la capacitación para personal médico y no médico de las policlínicas municipales, sobre todo en atención a población trans. Lo que hicimos fue profundizar el trabajo y ampliarlo a población trans no solamente adulta ya que había que pensar también en la niñez y la adolescencia. Nos pusimos a trabajar y la Secretaría de la Diversidad junto con la División Salud de la intendencia están desarrollando un programa de atención a los niños y adolescentes trans en las policlínicas municipales. Está en la etapa de diseño e implementación y antes de fin de año estará en funcionamiento. Hemos trabajo todo el año en ese proyectos en conjunto con la Universidad de la República”.
Tras resumir los ejes principales de la labor de la secretaría -trabajo, salud y cultura, “en el sentido más amplio”-, Miranda precisó: “Entendiendo no solamente la cultura como derecho, el derecho al acceso a la cultura, sino los espacios de expresión artística y la expresión en sí”. En esa línea señaló que se piensa en “destinar espacios a las personas LGBT en la producción de cultura, no solo el acceso como expectadores, sino como hacedores. Ese es un trabajo que hicimos desde el primer día con resultados muy interesantes y muy ricos”.
Otro debe, indicó, era el de la población de mujeres lesbianas. “Nosotros hicimos un informe junto al Fondo de Población de las Naciones Unidas y de ese informe surgieron varios ejes, algunos más esperables como salud o trabajo, pero fue muy fuerte en el tema de la cultura. Una falta de espacios con perspectiva. Ante este insumo lo que hicimos fue un festival llamado Insumisas, que fue un festival de arte lésbico en el teatro Solís, el año pasado, con un éxito impresionante. Fueron tres días de lleno de gente, en los que se pudo apreciar música, poesía, artes visuales, performance, intervenciones urbanas, muy interesantes. Con un nivel de calidad realmente sorprendente”.
En este sentido agregó que hay una iniciativa, que surgió en 2021, pero por la pandemia quedó en pausa, que es la semana de Arte Trans. Un evento internacional “con contenidos pensados por y para personas trans. Lo retomamos para realizarlo a principios del año próximo, seguramente a fines de marzo”.
Siguiendo esta línea indicó que la comuna realizará un segundo llamado para proyectos artísticos con perspectiva Lgbtiq+ para ser desarrollados en espacios públicos. “Esto nos interesa especialmente, primero porque los espacios públicos están en la agenda de prioridades de la intendencia en esta cuestión de Montevideo Más Verde. No me refiero solamente a parques, paseos, plazas, sino el transporte público, ya que son espacios en los que muchas veces se da la discriminación, la violencia contra personas LGBT y estamos trabajando con un grupo sobre el tema de generar espacios públicos libres de discriminación, espacios de convivencia. Lo venimos trabajando a muy buen ritmo y con muy buena aceptación”.
“Estamos en un momento de emergencia social y estamos trabajando mucho. Y la demanda es creciente”, concluyó.