Tras haber cobrado cierto protagonismo en la oposición al Frente Amplio (FA) y las políticas sociales llevadas adelante por sus gobiernos, Un Solo Uruguay comenzó a quedarse solo. Al celebrar este pasado sábado su aniversario ya no estaba rodeado de empresarios amigos. Varios de ellos, como Andebu el gremio de los dueños de los medios de radio y televisión, les dieron la espalda. Y el gobierno de la coalición multicolor, varios de cuyos integrantes solían acompañar a las movilizaciones, ya no les responde.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
A eso se suma que la política económica del gobierno de Luis Lacalle Pou no contempla ninguno de los reclamos del movimiento.
Así lo hizo ver a los medios el dirigente de Un Solo Uruguay, Marcelo Nougué. “Un año después no existe ningún contacto con el gobierno; elevamos 11 documentos y no hubo respuesta”, asevero.
“Es una situación rara; teníamos unas expectativas de un cambio de 180 grados”, dijo Nougué en radio Sarandí.
“De a rato les pesa el estatismo y muestra el miedo a realizar un cambio para lograr un país más moderno y más dinámico”, sentenció.
En este marco el movimiento pretende incidir en el proceso de reforma de la seguridad social llevando candidatos propios a las elecciones.
“Queremos ser los gestores de la reforma que se viene en Seguridad Social”, afirmaron.
Al finalizar el acto virtual realizado el sábado anunciaron los nombres de sus candidatos a las elecciones para el directorio del Banco de Previsión Social (BPS). Se trata de José Pereyra, por los empresarios, Luis Balboa, por los trabajadores y de Virginia Vaz, por los jubilados.
Estado caro
Tras insistir con el latiguillo del “alto costo del Estado”, Un Solo Uruguay afirma que el país perdió la oportunidad de “empezar en el camino de hacer una seria y profunda reforma del Estado”.
Criticaron al Frente Amplio por reclamar la renta básica con la cual “conceptualmente jamás vamos a estar de acuerdo” porque “son los que armaron el circo para que la plata no llegue a quien más la necesita y quede básicamente en sueldos, beneficios de funcionarios y funcionamiento”.