Una nueva polémica rodea a los Juegos Olímpicos, y esta vez tiene que ver con una citación que se produjo en la primera ronda de la disciplina boxeo femenino hasta 66 kilos, en el cruce entre Imane Khelif de Argelia y Angela Carini de Italia.
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Cuando el combate tenía menos de un minuto, la argelina golpeó a su rival de manera lícita, pero ante la potencia del impacto, la boxeadora italiana iba a abandonar el combate. Tras darse a conocer a la ganadora, Carini evitó darle la mano a su rival y abandonó el perímetro en un mar de llantos.
La polémica no tardó en llegar, y es que Khelif es una mujer cisgénero, es decir, su organismo segrega mayor cantidad de testosterona de la normal. Muchos medios la tildaron de “competidora trans”, pero el Comité Olímpico Internacional (COI) salió a desmentir esa información, asegurando que la argelina es una mujer y que además pasó todas las pruebas realizadas previo a la disputa de los Juegos Olímpicos.
La descalificación en el último Mundial
Según publicó el medio Sputnik, “El COI autorizó la participación de Khelif en los Juegos Olímpicos, pese a que, en el Campeonato Mundial de Boxeo Femenino de 2023, celebrado en la India, falló la prueba de elegibilidad de género que reveló que la atleta argelina tiene cromosomas XY, propios de los hombres y elevados niveles de testosterona."
"Khelif no es una mujer transexual, nació con aparato genital femenino, pero sí es una mujer intersexual, es decir, tiene cromosomas XY y altos niveles de testosterona, y por lo tanto cuenta con ventaja: su desarrollo muscular puede ser mayor y sus niveles de fuerza pueden ser superiores".