Según el Informe de la Comisión para la Paz (2003) y el de las Fuerzas Armadas al presidente de la República (2005) su muerte se produjo a raíz de las sistemáticas torturas recibidas en La Tablada, donde varios testigos lo identificaron como una de las personas que estaba siendo sometida a torturas en ese centro clandestino de detención y tortura que funcionó desde 1977 hasta 1983.
Tortura durante 40 días hasta su muerte
Algunos de esos testimonios, recogidos por distintos organismos de Derechos Humanos, dieron cuenta que Arigón Castel permaneció recluido y sometido a torturas durante alrededor de 40 días.
Lusiardo planteó este martes que, si bien no se puede determinar qué provocó el fallecimiento de Arigón, sí pudo establecer que se trató de una muerte violenta; confirmando así la información difundida en sitio web del Partido Comunista, respecto a que Arigón Castel fue asesinado en plena tortura: “Mientras estaba colgado, un soldado pidió urgente un médico para que lo revisara dado su estado de salud, pero éste no se anima a detener la tortura ni a bajarlo de la posición en que estaba. Tiempo después lo descuelgan y cae sobre otro detenido. Estaba muy mal y habría muerto a los pocos minutos”.
El informe de la junta médico-forense
La coordinadora del GIAF leyó la conclusión del informe de la junta médico-forense que estableció que:
"Por ser un enterramiento clandestino, en predio militar, de larga data, con material destinado asociado a la desintegración cadavérica de restos óseos humanos que presentan traumatismos premortem, que indican que se ejerció violencia sobre la persona víctima, la junta médico-forense establece que la forma médico legal de la muerte fue violenta por acción de terceros en el contexto de privación de librtad y malos tratos o tortura".
La antropóloga explicó que las actuaciones periciales permitieron establecer que varias de las lesiones que presentaba el cuerpo de Arigón Castel "son lesiones de defensa" o de alguien "que se está protegiendo".
Lusiardo detalló que se detectaron múltiples fracturas como en una costilla, un esguince de tobillo, hiper extensión en la cadera, movimiento repetitivo en la muñeca, que son "detalles que pueden colaborar con la hipotesis de identidad", manejada previamente por testigos.
Si bien, en relación al análisis traumático, la junta médica estableció que "los restos óseos no presentan lesiones traumáticas que permitan establecer con certeza la causa de muerte", sí "se ubicaron fracturas producidas por impacto de objeto contudente sobre la víctima en actitud de defensa, protegiendo su cara o cráneo".
"A su vez se ubicaron fracturas en el área del tórax que por su alineación y ubicación en arcos costales sucesivos, nos permiten establecer (o sugieren) que son producto de impactos contundentes. La multiplicidad de esas lesiones costales y su ubicación, es posible que haya contribuido con la causa de la muerte".
La junta médico-forense estableció además, que no es posible descartar que la muerte haya sido por traumatismos ajenos al sistema esquelético.
Se evidencia un "patrón de enterramiento"
El de Arigón Castel "evidencia un patrón de enterramiento" en el Batallón 14, afirmó Perciballe este martes.
Por el crimen del militante comunista ya hay cuatro personas procesadas, detalló el fiscal este martes.
El hallazgo de los restos de Arigón Castel se habría dado a poca distancia de donde fue encontrado el cuerpo de Sanjurjo, en la misma zona que ha sido indicada como de relevancia por los propios antropólogos para continuar las excavaciones.
A pocos metros de donde aparecieron los restos de Arigón Castel fue encontrada en junio de 2023 la también militante comunista Amelia Sanjurjo. En la misma zonz también fueron encontrados los cuerpos de Julio Castro, en 2011, y de Ricardo Blanco Valiente, en 2012.