Con el objetivo de de reforzar la seguridad del país mediante la identificación de personas potencialmente peligrosas, Estados Unidos implementará una nueva exigencia para otorgar la visa de ingreso al país. Los solicitantes deberán facilitar el acceso a sus redes sociales, direcciones de correo electrónico anteriores y números de teléfono.
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En marzo de 2018, el presidente Donald Trump anunció estos nuevos mecanismos de control que comienzan a implementarse este mes y que afectarán a alrededor de 15 millones de extranjeros que solicitan visas, de turismo, estudio y trabajo, para ingresar a los Estados Unidos cada año.
“La seguridad nacional es nuestra principal prioridad a la hora de adjudicar solicitudes, y cada posible viajero e inmigrante a los Estados Unidos se somete a una exhaustiva evaluación de seguridad”, argumentó el Departamento de Estado.
Según trascendió en la prensa local, se prevén graves consecuencias para quienes intentaran defraudar a las autoridades estadounidenses al no proporcionar la información requerida. Solo quienes tramiten ciertos tipos de permisos diplomáticos y oficiales quedarán exentos de este tipo de requisitos.
Esta nueva exigencia generó controversias, ya que muchas organizaciones de defensa de derechos cívicos la tildan como una violación a la vida privada.
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