El juez Alexandre de Moraes, perteneciente a la Corte Superma de Brasil, ordenó al expresidente Jair Bolsonaro que testifique ante la policía federal del país en un plazo de diez días sobre la asonada golpista que tuvo lugar en Brasilia el pasado 8 de enero, cuando simpatizantes del ex mandatario invadieron el Congreso, el palacio presidencial y el Tribunal Supremo del país.
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Fallando a favor de una solicitud presentada por un grupo de fiscales, el juez de Moraes manifestó que el testimonio de Bolsonaro era “una medida indispensable para el completo esclarecimiento de los hechos investigados”.
El 8 de enero de este año, los partidarios de Bolsonaro causaron destrozos en el Congreso del país, el palacio presidencial, y el Tribunal Supremo pidiendo por una intervención militar que derroque al presidente Lula Da Silva, quien había asumido una semana antes.
Tras su derrota electoral, Bolsonaro pasó 3 meses en Estados Unidos y regresó al país en marzo, pero el expresidente aún enfrenta problemas, ya que la Fiscalía Electoral de Brasil se expresó a favor de inhabilitar políticamente a Bolsonaro, acusado de lanzar ataques contra el sistema de votación del país.
El Ministerio Público presume que el líder cometió "abuso de poder político" al sembrar sospechas infundadas sobre la legitimidad de las urnas electrónicas, que el vecino país utiliza en sus procesos electorales desde el año 1996, según el diario ‘O Globo’.
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