Al día siguiente de la Segunda Vuelta de las Elecciones Generales 2021, realizada el 6 de junio, con el 100% de las actas procesadas, cuando Pedro Castillo del partido Perú Libre, ya era el virtual ganador y, por tanto, presidente del Perú; la líder del partido Fuerza Popular, Keiko Fujimori, habló de un supuesto “fraude” en el balotaje. Y aunque no aportó pruebas contundentes para tal acusación, la tesis sirvió para preparar, desde el primer día, un plan para vacar al maestro chotano.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
Andando los meses, la débil defensa del presidente ante las acusaciones de corrupción de u entorno más cercano como Bruno Pacheco, Juan Silva y sus propios sobrinos, han inclinado la balanza a favor de sus enemigos políticos. La popularidad del maestro y campesino chotano, ha caído dramáticamente, incluso entre los sectores que más lo defendieron.
Entre tanto, el Congreso viene ejecutando su plan de destitución de diversas formas: interpelaciones y censuras a ministros, dilaciones para debatir los proyectos del Ejecutivo, cambios en la Constitución para restar “poderes” a la presidencia; y como punto culmen, las mociones de vacancia contra el presidente, que hoy se da a través de una posible moción de destitución del presidente, por su supuesta participación en delitos de organización criminal entre otros que se le imputan.
Mociones de vacancia contra Castillo
Como se sabe, la primera moción de vacancia contra el presidente Castillo, se presentó el 25 de noviembre de 2021. Esto, a solo 4 meses de haber asumido el mandato. Fue impulsada por la congresista de Avanza País, Patricia Chirinos, sin que llegara a debatirse. La segunda moción de vacancia la presentó el congresista de Renovación Popular, Jorge Montoya, a casi ocho meses de gobierno. Se sustentó y aprobó el 14 de marzo del presente año, ante el Pleno del Congreso, con 76 votos a favor, 41 en contra y 1 abstención.
Con este resultado los congresistas aprobaron debatir la moción de vacancia en contra del presidente de la República, Pedro Castillo Terrones. Fue por la serie de cuestionamientos y hechos en relación a sus encuentros en la casa de Breña. Así también, por los nombramientos de ministros sin experiencia o con antecedentes, las interferencias en los ascensos de policías y militares, entre otros.
Castillo tuvo que acudir al Parlamento a brindar sus descargos sobre estos temas el lunes 28 de marzo. Y tal como María del Carmen Alva, presidenta del Congreso había advertido a los congresistas, lo escucharon, sin hacer preguntas, ni interrumpir.Luego de retirarse, tras su breve participación, se inició el debate con los ministros presentes. Se produjeron incidentes entre congresistas hasta llegar a la suspensión de la sesión por la exhibición, de parte de la oposición, de carteles que pedían la vacancia. Sin embargo, antes de medianoche, el Pleno del Congreso rechazó la moción con 54 votos en contra, 55 a favor y 19 abstenciones.
Bancadas en el Congreso ahora son 13
Para el momento del debate de estas dos mociones, la composición del Congreso era otra. Entonces existían 9 bancadas y ahora hay 13. Como se sabe, Fuerza Popular, Avanza País, Renovación Popular, Juntos por el Perú o Cambio Democrático y Podemos Perú que acaba de recomponerse, mantienen el mismo número de congresistas desde julio del año pasado.
Y si bien, Acción Popular y Alianza Para el Progreso han perdido un miembro cada bancada. Perú Libre, el partido de gobierno ha perdido 21, quedando muy debilitado o fraccionado. Y es bajo esta nueva estructura de fuerzas parlamentarias en la que el presidente Pedro Castillo, tendría que afrontar –todo indica que en breve- una moción, esta vez, de destitución.
La votación en el Pleno, para la censura del ministro del Interior Dimitri Senmache, y en cierta manera la realizada en la Comisión Permanente en la que aprobaron cuatro informes para librar de acusaciones constitucionales a personajes como Manuel Merino, Ántero Flores-Aráoz, Edgar Alarcón o Héctor Becerril, con apoyo de Waldemar Cerrón y Guido Bellido; pueden dar una idea de cómo podría moverse la balanza hacia la vacancia o destitución de Castillo.
Castillo ya no es de Perú Libre y Perú Libre es de oposición ahora
No se puede dejar de lado el hecho de que “a invitación” de Perú Libre, Pedro Castillo ha tenido que renunciar al partido que lo llevó al gobierno. “Hoy he presentado al Jurado Nacional de Elecciones mi renuncia irrevocable al partido político Perú Libre. Tal decisión obedece a mi responsabilidad como presidente de 33 millones de peruanos. Soy respetuoso del partido y sus bases construidas en la campaña”, dijo en redes el presidente.
La solicitud de renuncia al mandatario venía del líder del partido, Vladimir Cerrón, a través del Comité Ejecutivo Nacional, la Comisión Política del partido y la Bancada de Perú Libre en pleno. Esto fue el 28 de junio, y desde entonces se hizo tangible la soledad del mandatario. El equilibrio de fuerzas para enfrentar de nuevo al Congreso, frente a una nueva censura o destitución, será diferente. Podría leerse una clara señal de la situación actual, con la votación que terminó censurando al ministro Senmache.
A esto se suma el hecho de que la Comisión de Fiscalización, este jueves 30, aprobó el informe final sobre el caso Sarratea, en el que prácticamente acusa al mandatario de ser cabecilla de una organización criminal y de ir contra la Constitución, al no haber asistido o permitido que se le interrogara por sus reuniones en la casa de Breña. El informe se verá en el Pleno la próxima semana para su aprobación, lo que ya se da por descontado.
Ahora intentarán el juicio político
El informe pasará a la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales para ver si es posible un juicio político y, de ser así, se le citará para que haga sus descargos. Claro que podría apelar al Tribunal Constitucional como su abogado ha dado a entender, al precisar que no se ha cumplido con el debido proceso, que hubo adelanto de opinión y que las acusaciones en su contra no son las que indica la Constitución para una destitución.
Pese a que Vladimir Cerrón ha señalado que el partido no tiene ninguna intención de inhabilitar, suspender o vacar a Pedro Castillo; en las últimas votaciones la bancada ha estado del lado de la oposición, es decir, de la derecha. “El partido no tiene ninguna intención de inhabilitar, suspender o vacar a Pedro Castillo, jamás asumió semejante posición; pero sí mantiene una postura crítica a lo que cree cuestionable”, dijo en una carta en la página oficial de Perú Libre.