El trato estipulaba que las fuerzas israelíes debían retirarse del sur del Líbano cuando las armas y los combatientes de Hezbulá fueran retirados de la zona y el Ejército libanés fuera desplegado, en un período de 60 días, que concluyó este domingo 26 de enero.
Denuncian ataques y ocupaciones de las FDI en el sur del Líbano
Según cifras del Ministerio de Salud libanés, horas antes, el Ejército israelí asesinó a 24 libaneses e hirió a 124, que intentaban regresar a sus hogares en el sur del país.
Dos días atrás, Tel Aviv anunció que pretende mantener sus tropas en el sur de Líbano más allá de la fecha límite estipulada en el alto el fuego negociado por Estados Unidos (EEUU) que detuvo la guerra del año pasado con Hezbolá, la milicia chií que cuenta con el respaldo e Irán.
El líder de Hezbulá sentenció que la vulneración de la tregua por parte de Israel confirma que el Líbano necesita a la resistencia y aseguró que "la trilogía del pueblo, el Ejército y la resistencia [libanesa] es lo que puso fin a que 'Israel' llegara a Beirut".
En ese sentido, aseveró que "la continuación de la ocupación es una agresión a la soberanía y todos son responsables de hacerle frente, desde el gobierno hasta el pueblo, la resistencia, los partidos y todas las sectas".
Responsabilizan a EEUU y a la ONU
Además, Qasem responsabilizó a la ONU y a EEUU de "cualquier repercusión derivada del retraso de retirada israelí, que en la jornada de ayer (26 de enero) que dejó 24 muertos y 124 heridos entre las personas que trataban de regresar a sus poblaciones ocupadas en el sur del Líbano".
Asimismo, aseveró que el país hebreo "ha quedado como un criminal de guerra" por sus acciones en el país de Oriente Medio entre septiembre y diciembre del año pasado, cuando Israel asesinó a más de 4.000 personas e hirió a 16.638 más.
FUENTE: Sputnik