La estigmatización de los pobres es inherente al capitalismo

En este experimento, dirigido por Abhijit Banerjee, ganador del Premio Nobel de Economía en 2019, se dividieron aleatoriamente a participantes pobres en dos grupos: el grupo A recibiría un salario fijo durante 12 años, mientras que el grupo B obtendría el mismo salario pero solo durante 2 años. La suposición inicial era que aquellos con pagos a corto plazo (grupo B) estarían más inclinados a invertir debido a la urgencia financiera. Sin embargo, los resultados sorprendieron al revelar otra realidad.

Contrario a las expectativas, los individuos con pagos a largo plazo (grupo A) mostraron una mayor propensión a invertir. La tranquilidad financiera ofrecida por los pagos a largo plazo actuó como un incentivo para el espíritu empresarial, proporcionando una red de seguridad que permitió la aventura empresarial.

Estigmatización de la pobreza

Estos hallazgos desafían el estigma de que los pobres son inherentemente irresponsables o perezosos. Más bien, sugieren que la falta de recursos es lo que limita las oportunidades de inversión y desarrollo económico. Los experimentos controlados aleatorizados (RCT), empleados en este estudio por el Nobel de Economía, demuestran la verdadera naturaleza del comportamiento humano frente a la pobreza.

Además de desafiar los prejuicios arraigados, estos estudios redefinen el enfoque hacia los problemas de pobreza, tanto en países en desarrollo como en naciones ricas. En lugar de limitarse a transferencias de dinero, es crucial abordar la pérdida de sentido y la identidad que acompaña a la pobreza en las sociedades modernas.

Abhijit Banerjee alerta sobre la IA

En opinión del experto, diseñar medidas económicas específicas para esa población que perdió parte de su identidad es más urgente que nunca. “Uno de los desafíos que que todas las sociedades van a tener que enfrentar es la pérdida de sentido para un montón de trabajadores que perderán su ocupación con la llegada de la inteligencia artificial (IA)”.

Para Banerjee y Duflo, autores de "Good Economics for Hard Times", la solución radica en programas de asistencia y educación más generosos, especialmente para comunidades afectadas por la globalización. Este enfoque integral implica un cambio fundamental en el poder y la percepción de la pobreza en el contexto capitalista.

La estigmatización de los pobres como perezosos o incompetentes es un constructo social arraigado en las estructuras del capitalismo. Sin embargo, la evidencia respaldada por estudios como el realizado en Kenia demuestra que la estabilidad financiera puede desatar el potencial emprendedor y de inversión incluso entre los más desfavorecidos. Este conocimiento es crucial para informar políticas y programas que aborden no solo la pobreza material, sino también la pérdida de sentido y la identidad que la acompaña en las sociedades modernas.

Fuente: Con información del el diario El País (Madrid)