El oficialismo ignora el terrorismo de Estado

"Desde el lugar de haber sido víctima directa de la dictadura de este país, me opongo a esta ley promocionada por Cabildo Abierto y abrazada por toda la coalición", expresó.

Mediante un texto a titulo personal, Sequeira opinó que la ley de reparación a familiares de víctimas de la guerrilla entre el 1962 y el 1976, tal como está formulada, no debió ser aprobada, ya que significa "ir en contra del concepto de terrorismo de Estado".

En primer lugar, Sequeira cuestionó "el nombre y las fechas que pretende abarcar" asegurando que "no que clara la razón por la cual se abarca ese período". y sin reconocer la dictadura civil militar que hubo en el país a partir del año 1973.

Por otro lado, criticó que la ley, así como está formulada, a la familia de Mitrione, por ejemplo, "quien vino al país a entrenar al ejército y a la policía en las prácticas de tortura de última generación. En tal sentido se preguntó: "¿A quien en su sano juicio puede ocurrisele dar una reparación a un ser de este tipo?, ¿no sé lo debe condenar por estas acciones?".

La firmante también remarcó en Uruguay "no se reparó integralmente a ninguna víctima directa del terrorismo de Estado" y que "las reparaciones en ninguno de los casos fueron integrales como los organismos internacionales indican que deben ser".

"A los expresos se les da una suerte de pensión-jubilatoria, ya que para recibirla deben renunciar a sus aportes jubilatorios de los años que sí pudieron trabajar. A los hijos de víctimas de desaparición forzada tampoco se los reparó integralmente. Algún gobierno departamental les dio trabajo entrando en el escalafón más bajo de administrativo, sin importar si estaban formados para otros puestos", añadió-

También señaló que "se sigue sin reconocer la desaparición forzada, lo cual, ha traído problemas en sucesiones de bienes, por ejemplo. El Poder Judicial no termina de entender qué hacer cuando aparece un detenido desaparecido en un trámite judicial (con eso lidian las familias a 50 años del golpe de Estado)".

En el caso de niñas y niños nacidos en cautiverio igual, prosiguió Sequeira, se les brindó atención en salud, igual que a los expresos, por dos consiguientes generaciones, ley que actualmente "casi no funciona".

Ante todo lo expuesto, Sequeira plantea la siguiente interrogante: "Cómo no voy a estar en contra de un mamarracho de Ley, que dice que no se sabe qué representante del Poder Ejecutivo será quien decida dar o no dicha reparación, que significa lo más parecido a reparación integral del Estado a estás familias y no a miles de niñas, niños y adolescentes que siendo sus víctimas directas, aún no reconoce".

Asimismo, cuestiona que con esta ley "solo pretenden reparar a quienes han sido reparados hace más de 40 años" e "instaurar definitivamente la teoría de los dos demonios, cuando en el año 72 la supuesta guerrilla armada estaba totalmente desarticulada".