En esta jornada (jueves 2 de marzo), los trabajadores nucleados en la Federación de Funcionarios de Ancap (Fancap) están realizando un paro de 24 horas. La medida se tomó como forma de rechazar la decisión de las autoridades de la empresa estatal de realizar descuentos salariales a 85 trabajadores de la refinería de La Teja.
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Este sindicado acordó que en las instalaciones de esta refinería habrá una guardia gremial para garantizar la seguridad.
A través de un comunicado, Fancap explicó que esta decisión de Ancap “fue tomada como respuesta a la medida de no firma de permisos de trabajo llevada adelante por nuestro sindicato durante 15 días en el mes de diciembre del pasado año".
Tal medida, subraya la Federación, "no se afectó la producción de combustibles, ni el abastecimiento a la población por esta medida, que fue resuelta y aplicada como parte de un conflicto en el que fundamentalmente reclamamos el llenado de vacantes necesarias para una operación segura de la Refinería". Ademas fue en reclamo de "la no entrega a privados de las plantas de aereocombustibles que se encuentran en la actualidad en manos de Ancap”.
También manifestaron los trabajadores que rechazan el decreto 401/008 porque es "ultilizado por el gobierno y sus representantes en los organismos públicos para sancionar económicamente de forma arbitraria a los trabajadores".
La medida que se está cumpliendo este jueves tiene un marco complejo: al no haber un convenio colectivo vigente, no está establecido "de qué forma será atendida la operación de la Refinería durante el paro gremial".
Esto fue "denunciado en su momento por nuestro sindicato", y "es sumamente grave", ya que violenta "un convenio que nos regía hace décadas, dando garantías a los trabajadores para ejercer sus derechos sindicales, sino también porque establecía las guardias gremiales necesarias para mantener la producción, el abastecimiento y la integridad de las personas y equipos vinculados”.
Durante este paro, informó Fancap, no se realizarán planillas de control de equipos, ni datos de la planta, ni de productos químicos. Se garantiza exclusivamente que se realizarán tareas imprescindibles para el mantenimiento de la operativa. “Tendremos en consideración cuestiones fundamentales como la importancia de una operativa segura en una industria de alto riesgo como es la refinación de petróleo, las necesidades de la población de contar con un abastecimiento seguro y adecuado de combustibles y la afectación de las instalaciones que son patrimonio de todos”.