El atardecer del domingo 28 de diciembre fue el marco perfecto para la inauguración de la Terraza de Atlántida, un nuevo mirador costero ubicado en la Rambla Tomás Berreta, en la intersección con la calle Ciudad de Montevideo, uno de los puntos más visitados de la Costa de Oro.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
La obra recupera un predio donde funcionaba un viejo parador, ahora demolido, para dar paso a un espacio público integrado al paisaje de la Playa Mansa.
Con una superficie aproximada de 250 metros cuadrados, el proyecto combina tablones, arena, césped y mobiliario urbano de hierro y madera, respetando las normativas ambientales para la franja costera. A medio camino entre la rambla y la arena, el acceso se realiza a través de una antigua escalera de piedra que se conserva como parte del encanto original del lugar.
Un espacio pensado para disfrutar
La terraza incorpora juegos infantiles modernos y seguros, áreas de descanso y una gran hamaca que ya se perfila como escenografía favorita para selfies y fotografías. El diseño estuvo a cargo de la Dirección General de Espacios Públicos, en coordinación con la Dirección de Turismo y el Municipio de Atlántida, con el objetivo de crear un entorno pensado para el disfrute de niñas, niños, familias y visitantes.
La inversión total rondó los $ 1.700.000: $ 1.500.000 fueron aportados por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, mientras que los $ 200.000 restantes correspondieron al Gobierno de Canelones.
Recuperar lo que estaba en desuso
Durante el acto, el intendente Francisco Legnani destacó el valor simbólico de transformar un espacio abandonado en un punto de encuentro ciudadano. “Los lugares en desuso generan tristeza; hoy esa oscuridad ya no está y tenemos un espacio hermoso”, afirmó.
El alcalde Ernesto Capano recordó que el viejo parador se había convertido en un sitio peligroso y llamó a cuidar la nueva terraza: “Tiene que ser un lugar sagrado, para disfrutarlo y amarlo”. Vecinas y vecinos celebraron la recuperación del predio, coincidiendo en que la Terraza de Atlántida ya se proyecta como un nuevo emblema de la ciudad.