Maldonado nuevo
El lunes pasado el escenario de violencia se trasladó a Maldonado Nuevo cuando en horas de la madrugada dos hombres que circulaban en moto asesinaron a balazos a una mujer de 40 años.
El martes después del mediodía, otra vez dos hombres en moto, asesinaron a dos jóvenes de 25 y 27 años, que estaban parados en una esquina del mismo barrio. La policía se encargó de difundir que los tres muertos tenían antecedentes.
A partir de estos hechos el ministerio del Interior decidió intervenir el barrio y altas jerarquías policiales se desplazaron a Maldonado para elaborar el plan de contingencia junto a la Jefatura local.
Desde entonces se han desarrollado múltiples operativos en los que se detuvo a varios delincuentes, entre los que hay ladrones de autos, rapiñeros y vendedores de drogas. Pero los criminales en moto no han sido encontrados.
Juan Pigola, director de Tránsito de la intendencia de Maldonado, y Erode Ruiz, jefe de Policía en este departamento, tenían previsto reunirse el domingo para elaborar un plan de contralor sobre motos, ya que se ha constatado que muchísimas circulan en condiciones irregulares o ilegales.
Martinelli en Maldonado fue confundido con un narco
Poco antes de estas últimas muertes, el ministro del Interior Nicolás Martinelli, concurrió imprevistamente a Maldonado en horas de la madrugada para recorrer algunas zonas. En una de ellas fue confundido con un narco por una patrulla policial, sorprendida por la circulación de una camioneta de alta gama en ese lugar y a esa hora. Cuando se acercaron, un efectivo reconoció al ministro.
El Sindicato Policial de Maldonado (SIPOLMA) emitió un comunicado en el que cuestionan la visita de Martinelli porque “llega demasiado tarde”.
El SIPOLMA sostuvo que “el señor ministro se va a encontrar con unidades policiales sin el suficiente personal policial para realizar un adecuado servicio. La realidad social superó a los mesías de la seguridad pública y a los que prometían que se acabaría el recreo”.
Agregan que la situación que vive el departamento “se debe a la cruda realidad que genera el narcotráfico y al deterioro social que este provoca”.