Si se aumentara el precio de los cigarrillos se retrasaría la edad de inicio en el tabaquismo y se bajaría el consumo de la población en general. Este concepto se planteó en un extenso estudio académico realizado por el Departamento de Economía (Decon) de la Facultad de Ciencias Sociales (Udelar), y que fue presentado este lunes.
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En esa línea, señalan los investigadores, había que aumentar la carga impositiva en este producto a razón de dos puntos por año. De aplicarse esta medida, para el año 2028 habría 21% menos de fumadores.
Según declaró a la prensa Patricia Triunfo, una de las investigadoras del Decon, se estima que en cinco años "podría haber 70 mil fumadores menos; esto generaría menor consumo, pero, además, (un) aumento de la recaudación".
Señalan los investigadores que al subir el Impuesto Específico Interno (Imesi) la recaudación podría registrar un aumento de 5%, aunque esto incida en una baja notoria del consumo.
Una política con esta orientación, subrayan, profundizaría los efectos positivos de las políticas antitabaco implementadas en los últimos años, que redundaron en una baja de 33% en el consumo en la población general, y, como dato más que significativo, implicaron un descenso de 72% en el consumo adolescente.
El estudio también indica que hacia el año 2020, el 15 por ciento de las defunciones tenían como causa principal el consumo de tabaco. Esto es, unos 6 mil de los 40 mil fallecimientos anuales, y se agrega: esta cifra equivale "al total de defunciones registradas por covid-10 entre 2020 y 2021".
Este saldo mortal, subrayan los investigadores, representa "la causa más evitable de moralidad prematura" en Uruguay, y recuerdan que las enfermedades provocadas por este consumo representa el 17% del gasto en salud.
El economista Guillermo Paraje, especializado en economía de la salud, este estudio confirma que el aumento de precios y de los impuestos son clave para "reducir el consumo de tabaco, no solamente de los consumidores actuales, sino de los futuros".
“Uruguay ha sido líder en la implementación de algunas políticas a nivel regional que fueron replicadas en otros países”, remarcó Paraje. No obstante, “se ha quedado retrasado en términos de impuestos, superado en términos de carga impositiva por sus países vecinos y por otros países de la región”.