El Foro Latinoamericano de Prácticos fue creado el 2 de julio del 2004 en instancias en que se desarrollaba el XVII Congreso Internacional de Prácticos IMPA (International Maritime Pilots’ Association) en Estambul.
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A partir del año 2005 este encuentro se realiza en cada año impar en forma itinerante a lo largo y ancho de toda Latinoamérica.
Esta es la segunda oportunidad en que se elige a Uruguay como sede del referido evento. En el año 2005 Uruguay fue sede del foro, oportunidad en la que se establecieron el formato actual y los estatutos del mismo.
Prueba de la importancia que tiene este evento para Uruguay es que haya sido declarado de interés por los ministerios de Turismo, de Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, de Transporte y Obras Públicas, y de Defensa, así como también por la Intendencia de Montevideo.
El foro es organizado por la Sociedad de Prácticos del Puerto de Montevideo y la Corporación de Prácticos del Río Uruguay, Río de la Plata y Litoral Marítimo Oceánico.
Está previsto que el encuentro aborde una intensa agenda sobre tópicos técnicos profesionales relativos al practicaje y su relación con la seguridad de la navegación marítima, íntimamente ligada con la protección al medioambiente.
La Asociación Internacional de Prácticos (IMPA) es integrante de la Organización Marítima Internacional (OMI) de las Naciones Unidas (ONU), organismo que fuera creado con el objetivo principal de proteger el medioambiente (Marpol).
El medioambiente, especialmente el marítimo, es hoy tema principal en el mundo; por tal motivo, no escapa a ser tratado como tema central en este foro internacional de profesionales técnicos expertos en maniobras de buques en zonas de
“aguas restringidas” con el riesgo que ello significa cuando navegan en aguas jurisdiccionales próximas a la costa.
El Foro Latinoamericano de Prácticos es un espacio para debates que tiene como objeto promover el intercambio de informaciones relativas al practicaje en el país organizador y en el resto de los países participantes. Se estima una asistencia de 50 profesionales nacionales y 60 profesionales de Latinoamérica (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Panamá y Perú), junto a invitados de Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Francia, España, Nueva Zelanda, entre otros).
Antigua profesión
El practicaje es una de las profesiones más antiguas y es un servicio esencial para la seguridad de la navegación y el cuidado del medioambiente y la vida humana en el mar.
El práctico es un profesional marino con demostrada experiencia, titulado por el Estado a través del Poder Ejecutivo, que actúa como asesor del capitán del buque al cual se le da servicio en la navegación y maniobras en aguas restringidas dentro de la jurisdicción nacional, como garantía de seguridad, visto que es imposible que los capitanes de los buques posean los conocimientos detallados de cada zona y de la reglamentación local de los diferentes puertos y vías navegables de todo el mundo.
El practicaje es un servicio que se brinda las 24 horas de los 365 días del año, sin interrupción. El práctico es el primer representante de Estado en tomar contacto con el buque a su arribo y el último cuando este deja el territorio nacional.
La profesión del práctico tiene varias facetas poco conocidas por el público en general, entre las cuales podemos destacar su experticia en maniobra con buques de gran porte, la capacidad de empatía con los capitanes de los diferentes buques, quienes depositan la confianza para la conducción de su buque y el estado físico y emocional para embarcar y desembarcar de los buques en movimiento a distancia de la costa.
Esto último es tal vez lo más llamativo, ya que deben trasladarse en embarcaciones menores hasta y desde los buques pasando de esta al buque y viceversa, por medio de una escala de cuerdas y tablas conocida como “escala de prácticos”, esta forma de embarque y desembarque es la misma desde que existe la navegación marítima, práctica que tiene asociados sus riesgos.
Sabido es que el comercio marítimo mueve más de 80% del comercio internacional. Esto lleva aparejado un aumento constante de la cantidad de buques que navegan alrededor del mundo así como el incremento de sus dimensiones en eslora (largo), manga (ancho) y calado (profundidad); hoy llegan a los puertos uruguayos con tamaños de hasta 335 metros de eslora, 50 metros de manga y 12 metros de calado.
La gran mayoría de los puertos en Latinoamérica datan de principio del siglo XX, confeccionados estos para buques de dimensiones menores (buques promedios de 140 metros de eslora). El Puerto de Montevideo cumplió un fundamental protagonismo en el nacimiento de la historia de la República en sus orígenes, así como el siglo XX lo vio desarrollarse tal como hoy lo conocemos, junto a los puertos del litoral oeste y este del territorio nacional.
Podemos decir que a partir del año 2000 se comienzan a ver los frutos de los esfuerzos realizados cuando se inaugura el nuevo Canal de Martín García. Este canal es fundamental para la operativa y desarrollo de los puertos del litoral oeste en el río Uruguay, vinculando al puerto de Nueva Palmira con la hidria de Paraguay y Argentina, dando una salida directa al mar para buques de gran porte cargados con un calado de 32 pies (9,75 m) disminuyendo la navegación de los mismos por el río Paraná en aproximadamente 12 horas, siempre y cuando la altura del río lo permitiera.
En la actualidad, el Canal Martín García está dragado como para buques con un calado máximo de 10,36 metros. A su vez, el Puerto de Montevideo, a fines del siglo XX desarrolla, y luego en el siglo XXI pone en marcha, un plan maestro que le ha permitido recibir buques provenientes del litoral y completar sus cargas a 12 metros de calado, haciendo necesarias la extensión y profundización del canal del Puerto de Montevideo hasta el kilómetro 42.
Hoy se puede afirmar que Uruguay es la salida al mar de la hidrovía con mayor calado. Para lograr estos objetivos se debieron programar y estructurar inversiones con apoyo económico y político de los diferentes gobiernos a lo largo del tiempo, acompañado esto por el alto profesionalismos de los prácticos, el sistema reglamentario estricto que los rige y la continua capacitación en tecnologías aplicadas a maniobras con nuevos sistemas de gobierno para los buques.
El tráfico marítimo en aguas jurisdiccionales restringidas tiene como objetivo principal la seguridad en la navegación y los prácticos cumplen un rol fundamental brindando asesoramiento en las maniobras a los capitanes de los buques que navegan por las mismas, visto que es el garante que tiene el Estado para asegurarse de que los buques no tomen riesgos innecesarios, o bien que quien esté al frente de cada maniobra, con sus riesgos asociados, sea un experto en maniobras y conocedor de la zona. Esto es con el fin de proteger los recursos naturales, la vida humana en el mar, el medioambiente, las obras de dragado y las instalaciones en canales y puertos.
Es importante tener en cuenta que cualquier eventual accidente o incidente en las vías navegables tendrá como consecuencia la interrupción del tráfico marítimo en esa área, conllevando pérdidas al Estado. Sabido es que, ante incidentes y/o accidentes marítimos de mayor o menor envergadura, las consecuencias no siempre son tangibles y con valor de reposición. Esto significa que cualquier daño al medioambiente no es reparable con dinero, lo que es motivo fundamental para la prevención de accidentes y no tener que actuar en consecuencia de los mismos.
El Foro Latinoamericano de Prácticos es el ambiente en que se realiza el intercambio de experiencias profesionales de expertos en maniobras con buques de gran porte.