En el dictamen fiscal, al que accedió 25siete, se relata que los expresos políticos fueron incomunicados, sin comida e insuficiente bebida y sin un lugar para hacer sus necesidades, entre otras torturas.
Luego que fueran detenidos y trasladados desde sus domicilios al establecimiento militar fueron sometidos a torturas con picana eléctrica para lo que previamente se los rociaba con agua. También sufrieron colgamientos y caballete. El dictamen fiscal señala que todo esto era para que admitieran pertenecer al Partido Comunista y para que dieran información sobre otros integrantes de esa organización.
Según la solicitud de procesamiento, el fiscal indicó que, en base a los relatos de los testigos y las víctimas ante la justicia, la tortura contra Carlos Pintos consistió en un colgamiento desde una roldana impidiendo que se apoyara en el piso, esposado hacia atrás y luego disponiendo un plantón que se extendió durante cinco días.
Todos los testigos de la causa señalaron a Chaine Díaz. Entre las torturas también relataron que padecieron simulacros de fusilamiento.
Los expresos políticos que fueron torturados relataron a la justicia que Chaine -a quien le decían Chajá-, se golpeaba su bota con la fusta antes de comenzar a torturar. Además, el dictamen fiscal refiere el testimonio de un soldado de la unidad que relató las torturas contra Ariel Zapata: “en lugar de darle agua porque tenía sed le daban agua con sal”, recordó.