Enigmas de la creación
El intendente Zunino manifestó que a partir de esta obra “se abren muchísimas preguntas de investigación” y abordarlas será, sin dudas, un desafío para el Museo Blanes.
En esa misma línea, María Inés Obaldía afirmó que la pintura tiene “una serie de enigmas”, y “ahora empieza un largo camino donde los y las técnicas estarán trabajando e investigando”.
Materialidad y análisis
Ante este acontecimiento, el Museo, a través de sus equipos técnicos y profesionales, da inicio a una investigación específica sobre la pieza para estudiar su materialidad y sus antecedentes históricos, tendiente a profundizar en el conocimiento de esta obra basado en evidencia científica.
Es importante recordar que para hacer una atribución a un artista es necesario contar con estudios de una cantidad relevante de obras que sirvan como marco de referencia. Para esta obra, en primer lugar, se realiza la investigación de la materialidad mediante la observación visual directa, analizando el estilo y la composición. Posteriormente, se amplía este análisis con el uso de lupa estereoscópica y microscopio para examinar las pinceladas, el patrón de grietas y las características de la tela.
Primeros indicios
En estas primeras operaciones, el equipo técnico pudo identificar algunas similitudes con la pintura de Blanes en cuanto a la técnica y el estilo pictórico, así como en los materiales, pero estas observaciones aún requieren confirmación.
Desde principios del siglo XX existen tecnologías que complementan los estudios visuales y permiten conocer y comprender mejor las obras de arte. En este caso, se utilizó luz ultravioleta para estudiar las fluorescencias del barniz y los pigmentos.
Esto permitió identificar restauraciones previas, llamados “repintes”, es decir, pintura no original que cubre la original en ciertos sectores. Estas áreas repintadas se observan como manchas oscuras.
Además, se realizaron radiografías para observar las capas ocultas de la pintura, ya que los rayos X penetran a través de las capas superficiales del barniz e incluso algunos colores de la pintura, revelando las capas más profundas. A través de esta técnica, se descubrió un notable deterioro en la obra, mucho mayor al que se podía observar visualmente. Sin embargo, no fue posible determinar qué hay debajo del rostro femenino, ya que la pintura es radiopaca, es decir, el artista utilizó pigmentos que no permiten que los rayos X los atraviesen.
El próximo paso será un tratamiento con fluorescencia de rayos X, una técnica que permitirá identificar elementos químicos y tener indicios sobre los posibles pigmentos utilizados en la obra. A medida que se vayan sumando resultados y avanzando en el estudio histórico, se evaluará la posibilidad de realizar otros análisis dentro de las capacidades que ofrece la Facultad de Química de la Universidad de la República (Udelar), por ejemplo.