El viernes 21 de julio en la conferencia de prensa brindada en la sede de Fiscalía con el equipo de antropólogos y la Institución Nacional de Derechos Humanos, el fiscal de delitos de Lesa Humanidad Ricardo Perciballe, emitió un claro mensaje dirigido a los soldados que participaron "tangencialmente" de enterramientos, argumentando que los delitos de encubrimiento han prescrito (a diferencia de lo que ocurre con los delitos de lesa humanidad que son imprescriptibles) y la Fiscalia Especializada asegura que quienes aporten información no serán perseguidos penalmente.
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El fiscal Ricardo Perciballe por un lado ha perdido la esperanza de que quienes fueron responsables aporten información pero además, en el caso de los responsables no se valora obtener la misma cambio de impunidad.
Al pedido fiscal se suma como garantías que por la ley N° 18.026 se elimina el concepto de Obediencia Debida.
En el artículo 9 expresa: (Obediencia debida y otros eximentes).- No podrá invocarse la orden de un superior, ni la existencia de circunstancias excepcionales (como, por ejemplo, amenaza o estado de guerra, inestabilidad política o cualquier otra emergencia pública real o presunta) como justificación de los crímenes tipificados en los Títulos I a III de la Parte II de la presente ley. Por consiguiente, ni haber actuado bajo órdenes superiores, ni la invocación de circunstancias excepcionales, eximirán de responsabilidad penal a quienes cometan, en cualquiera de sus modalidades, los crímenes o delitos referidos.
Dentro de la estricta disciplina militar y escalas jerarquicas el "Silencio" ha funcionado como parte de las Obediencias por parte del personal subalterno.
La solicitud pública realizada por el Perciballe fue consultada previamente con Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos quienes dieron su visto bueno, sin dejar de exigir al Poder Ejecutivo que ordene a los mandos militares a aportar toda la información que manejan.