A pesar de su apuesta al diálogo, AEBU no ha obtenido ningún eco en el directorio del Banco República (BROU) para sus reclamos, ni tampoco lo han logrado sus reivindicaciones en otros bancos públicos. Por ello activó el viernes 16 de abril la cláusula de prevención de conflictos del convenio de la banca oficial en el Ministerio de Trabajo.
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Se abrió desde entonces una semana que, de acuerdo a la voluntad negociadora de las partes, podrá discutir sobre la eliminación de puestos de trabajo, las reestructuras en los bancos oficiales, las privatizaciones, el ingreso de personal y el cuidado de la salud de trabajadores y usuarios frente a la pandemia.
La situación planteada tiene como fondo a un gremio que ni en el BROU ni en las sucursales de la Agencia Nacional de Vivienda, el Banco Hipotecario y el Sanatorio del Banco de Seguros ha dejado un solo día de atender presencialmente a los uruguayos.
Particularmente en el BROU se ha hecho visible la falta de solución de los problemas de seguridad, de ventilación en los locales de trabajo y de rotación de funcionarios. Tampoco han sido contemplados los extensos viajes en el transporte público a los que muchos trabajadores se exponen cada día durante horas, entre otras situaciones.
Pese a los insistentes planteos formulados desde hace un año, el directorio ha permanecido inmóvil, excusándose en la falta de personal para tomar medidas. En forma paralela se han dado reestructuras en diferentes áreas sin discutirlas previamente con el sindicato, como lo establece el convenio colectivo, y sin atender las necesidades reales de la institución para el mantenimiento de los servicios, el correcto funcionamiento de las áreas y el cumplimiento de las metas establecidas.
De este modo, sostiene AEBU en un comunicado del Consejo del Sector Financiero Oficial, «se continúa por el camino de obligar a los trabajadores a pagar la crisis económica producto de la pandemia, mientras sectores históricamente aliados a la clase alta de nuestro país se enriquecen».