Diversos organismos reconocen las desventajas de las radiaciones emitidas por el WiFi, entre ellos:
- Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC)
- Comité Científico Asesor de Radiofrecuencia y Salud (CCARS)
- Comisión Internacional de Protección Contra la Radiación No Ionizante (ICNIRP)
- Instituto de Ingeniería Eléctrica y Electrónica (IEEE)
- Organización Mundial de la Salud (OMS)
La Agencia Internacional de Investigación del Cáncer clasifica las ondas electromagnéticas emitidas por el WiFi como un posible agente carcinógeno de tipo 2B en humanos, categoría que incluye agentes con alguna evidencia de causar cáncer en humanos. Además, la OMS estima que entre el 5% y el 10% de la población mundial presenta hipersensibilidad a la radiación de las redes inalámbricas, lo que provoca diversas afecciones.
Riesgos para la salud asociados al WiFi
Entre los efectos en la salud asociados a la exposición prolongada a las ondas WiFi, se destacan:
- Electrosensibilidad: algunas personas experimentan reacciones físicas a la exposición a campos electromagnéticos, conocidas como electrosmog.
- Mayor riesgo de cáncer: se ha relacionado la exposición a la radiación con un mayor riesgo de padecer glioma, un tipo de cáncer cerebral maligno.
- Dolores de cabeza y problemas de sueño: los dolores de cabeza, el insomnio y el cansancio son síntomas frecuentes en personas electrosensibles.
- Alteraciones emocionales: irritabilidad, cambios de humor e incluso depresión pueden aparecer en personas sensibles a las radiaciones.
- Calentamiento de tejidos: aunque a niveles bajos, la radiación WiFi puede aumentar la temperatura de los tejidos expuestos.
Alternativas al WiFi
Algunos sectores consideran que la radiación emitida por el WiFi es débil en comparación con otros dispositivos electrónicos, como los teléfonos móviles, por lo que sus efectos serían menos graves. Sin embargo, para quienes desean reducir su exposición, existen recomendaciones para minimizar los riesgos:
- Conexión por cable o fibra óptica: optar por una conexión de cable elimina la emisión de radiación en el entorno doméstico.
- Ubicación del router: colocar el router a más de un metro de las áreas donde las personas pasan mucho tiempo ayuda a reducir la exposición.
- Apagar el router en horas no necesarias: especialmente por la noche, desconectar el router reduce la exposición a las ondas.