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Like Inteligencia Artificial | periodismo |

Lo humano vs la máquina

¿La Inteligencia Artificial es una amenaza al periodismo?

¿En qué medida los desarrollos de la Inteligencia Artificial pueden desplazar al ser humano en la generación de contenidos periodísticos?

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El uso de aplicaciones de Inteligencia Artificial (IA) es tendencia últimamente, sobre todo para la creación de avatares y diseños francamente impresionantes en redes sociales, pero el fenómeno también ya alcanza al periodismo: varias empresas de medios recurren a softwares para redactar notas sin la mediación humana, algo que inquieta a quienes viven de esta profesión de por si precaria, y con el riesgo constante de acabar en la calle.

Así, por ejemplo, compañías de noticias como The Washington Post se valen de programas de IA que posibilitan una mayor automatización de tareas repetitivas, como la generación de notas sobre finanzas o deportes, y eso ha llevado a una inevitable reducción en el número de puestos de trabajo en estas áreas, lo cual acentúa el miedo de muchos periodistas a volverse prescindibles.

¿En peligro de extinción?

¿Qué tan real es este peligro? ¿Morirá el periodismo, como ahora lo entendemos, por el creciente uso de IA en los medios de prensa? Según la plataforma ChatGPT, no necesariamente.

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“La IA puede ser una herramienta valiosa para la investigación, organización y presentación de datos y noticias, pero la verificación de la información, su interpretación y la toma de decisiones sobre qué es noticia y cómo se presenta aún requieren la participación humana. La IA puede complementar el trabajo periodístico, no reemplazarlo”, respondió el programa.

Grosso modo, existen cinco elementos que evidencian las falencias de la IA:

El uso de herramientas de IA para el periodismo entraña el riesgo de sesgos y discriminación, pues un programa diseñado para generar un texto coherente a partir de un océano de información digital puede perpetuar ciertos prejuicios en la sociedad.

La IA puede generar noticias falsas o manipuladas, lo que puede socavar la credibilidad del periodismo y los medios.

Las noticias automatizadas carecen de la perspectiva humana y la profundidad necesarias para contar historias complejas e impactantes.

La IA nunca podría redactar una crónica: aunque puede generar textos automatizados en base a patrones y modelos previos, todavía carece de la capacidad de entender y expresar las emociones, las opiniones y los matices humanos que hacen que una crónica sea única y auténtica.

Los textos generados por IA todavía tienen limitaciones en cuanto a la calidad y la coherencia del lenguaje, por lo que es necesaria una revisión y edición humana para garantizar claridad y precisión en el mensaje.

Por otro lado, si bien es cierto que se prescinde de plazas para la redacción de notas básicas y esquemáticas, también lo es que hay una mayor demanda de periodistas especializados en áreas como la investigación, la verificación de información y la producción de contenido multimedia. Se cierra una puerta, pero se abre otra.

Entre los programas más socorridos para la redacción de noticias destacan Articoolo, Heliograf, Wordsmith o Quill, capaces de generar contenidos de manera rápida y eficiente. Las opciones abundan, pero al final de la jornada, los tiempos cambian, las maneras de hacer periodismo también, pero la esencia del oficio, la sagacidad para lanzar la pregunta indicada, el olfato para vislumbrar la noticia, todavía es patrimonio humano. Todavía…

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