El Cabo M. L. N. L., 35 años, perteneciente a la Unidad Nº 23 del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) que estaba realizando el curso para ascender a sargento, murió de un disparo que recibió en la cabeza durante una práctica en el polígono de tiro.
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El Ministerio del Interior se encuentra realizando una investigación urgente sobre lo sucedido al igual que la fiscalia.
Según pudo saber Caras y Caretas en momentos que se encontraban realizando calistenia en línea de a dos frente a un compañero (cambio de cargador), un CABO aprovisiona el arma con un cargador con cartuchos y efectúa un disparo al Cabo ahora fallecido, impactándole a la altura del pómulo izquierdo en el rostro.
Formación
Este trágico accidente puso en el tapete nuevamente los reclamos del sindicato policial que entiende son muy escasos los tres meses de formación para capacitar funcionarios que luego realizan tareas ejecutivas.
En diálogo con Caras y Caretas la Presidenta del sindicato Patricia Rodriguez manifestó que la formación del funcionario policial no sólo debe atender a sus capacidades a la hora de reprimir el delito, sino que deberían volver a tener cursos con la Facultad de Derecho pero fundamentalmente con la fiscalia, ya que en la medida que los funcionarios policiales son auxiliares directas del fiscal, deben conocer su visión sobre los procedimientos.
Entiende que en esa capacitación debe atender fundamentalmente el tema del manejo de la salud psíquica.
«Un 75% de las certificaciones médicas que se producen en el Estado son de funcionarios del Ministerio del Interior. La actividad llevada adelante provoca fuertes cuadros de salud mental que llevan a cuadros depresivos e incluso suicidios», manifestó.
«Otro elemento que opera en la salud mental de los funcionarios que ingresan sanos a la Institución es el acoso laboral que produce la verticalidad del mando, donde no todo el mundo que asciende tiene la capacidad para manejar gente a su orden», expresó.
Rodríguez expresó que la demanda de que la formación tenga como mínimo un año de capacitación es una demanda histórica y no nace con este gobierno pero entiende que el problema es la no resolución entre el tiempo de formación necesario y la demanda de funcionarios policiales en la calle que reclama la sociedad.
«Los compañeros tienen que estar capacitados por su seguridad y la de la sociedad», concluyó.
Uso del arma
Otra fuente del sindicato coincidió con el poco tiempo de formación que reciben los funcionarios policiales pero subrayó ademas que en la instrucción del manejo del arma debe tener un mínimo de entre 4 y 6 meses pero hay otro problema mas grave, y es que para ser instructor de tiro se debe ser oficial, y la jerarquía no siempre se acompaña de la suficiente capacitación.
«Lamentablemente accidente de este tipo o los ocurridos en las propias casas de los funcionarios tienen que ver con esa falta de capacitación donde lo primero es manejar todas las medidas de seguridad de manejo de un arma de fuego», expresó.
«A veces los instructores recibieron un curso de un mes y con ese escaso conocimiento instruyen a los sub alternos», concluyó.