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Mundo China | terremoto |

Tragedia

China sufrió el terremoto más mortífero en nueve años

Terremoto en China, magnitud 6,2, deja al menos 126 muertos, cientos de heridos y casas destruidas. El frío intenso dificulta las operaciones de rescates.

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En la oscura medianoche del lunes 18 de noviembre, un terremoto de magnitud 6,2 sacudió el distrito de Jishisian, en las provincias montañosas de Gansu y Qinghai, en el noroeste de China. El resultado fue devastador: al menos 126 personas perdieron la vida, más de 730 resultaron heridas y cientos de hogares quedaron reducidos a escombros. Sin embargo, el drama no terminó con el primer temblor; nueve réplicas, la mayor de ellas con magnitud 4,1, siguieron atormentando a la población.

Las bajas temperaturas, que descendieron hasta los -15° Celsius, complicaron aún más la situación para los supervivientes. Muchos, temerosos de las réplicas, optaron por pasar la noche a la intemperie, enfrentándose al crudo invierno sin refugio. El Gobierno de Xi Jinping instó a una rápida respuesta por parte de las autoridades locales, consciente de la urgencia de la situación.

Las operaciones de rescate, llevadas a cabo entre edificios derrumbados y deslizamientos de tierra, se volvieron cada vez más desafiantes. Los equipos de rescate, compuestos por médicos, bomberos y fuerzas armadas, se movilizaron con rapidez. Más de 2,000 bomberos y un contingente militar se unieron a la misión, respaldados por una asignación de 28 millones de dólares para asistencia.

El Consejo de Estado desplegó un grupo de trabajo en las áreas afectadas para coordinar la respuesta y asegurar la entrega de suministros esenciales. Hasta el momento, se distribuyeron 2,600 tiendas de campaña, 10,400 camas plegables, 10,400 edredones y 1,000 juegos de estufas, junto con otros 111,500 artículos de socorro.

Sin embargo, la geografía montañosa y la falta de infraestructuras resistentes en la región jugaron en contra. Los informes locales sugieren que la escasa resistencia sísmica de los edificios contribuyó al elevado número de víctimas. El terremoto, de baja profundidad, provocó una mayor destrucción, dejando a muchas personas sin tiempo para reaccionar, especialmente aquellas que dormían cuando ocurrió el desastre.

Li Haibing, experto de la Academia China de Ciencias Geológicas, explicó que la poca profundidad del terremoto amplificó su impacto, a pesar de una magnitud aparentemente moderada. Esta situación recuerda a tragedias anteriores, como el terremoto en Yunnan en 2014, que dejó 617 muertos, y la devastadora catástrofe de Sichuan en 2008, donde perdieron la vida 70,000 personas.

CHINA | Un terremoto de magnitud 6,2 sacude parte de la provincia de Gansu | EL PAÍS

A medida que los equipos de rescate luchan contra el tiempo y las adversidades climáticas, la nación se enfrenta a la cruda realidad de reconstruir no solo edificaciones, sino también la esperanza de quienes han perdido seres queridos y hogares.

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