El movimiento palestino Hamás atribuyó a Israel la muerte de un bebé de 10 meses de nacionalidad israelí-argentina, de su hermano de cuatro años y de su madre, que estaban retenidos desde el 7 de octubre por el grupo islamista en la Franja de Gaza.
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"Tres retenidos han muerto como resultado de bombardeos sionistas realizados de forma previa en la Franja de Gaza", señalaron este miércoles las brigadas Ezzedin Al Qasam, brazo armado de Hamás, según dio a conocer el diario palestino Filastin.
El capitán israelí Roni Kaplan, portavoz en reserva de las Fuerzas de Defensa de su país, ratificó que Hamás había confirmado las muertes de Kfir Bibas, de 10 meses; su hermano Ariel, de cuatro años, y su madre Sherry Silverman, y señaló que el cuerpo castrense estaba tratando de verificar la información.
Los tres rehenes fueron secuestrados junto al padre de los niños, Yarden Bibas, en el kibutz Nir Oz, una comunidad en el sur de Israel, durante el ataque inesperado que ejecutó Hamás el 7 de octubre en territorio israelí.
El fallecimiento de los dos niños y su madre mientras permanecían en cautiverio se conoce en el último día del cese al fuego entre Israel y Hamás, en el marco de una tregua de cuatro días que comenzó el pasado viernes y que se extendió por dos jornadas más.
Hamás liberó hasta el momento a 81 rehenes de diversas procedencias de los 250 que secuestró durante su ataque del 7 de octubre, de los cuales nueve tienen doble nacionalidad argentina, mientras que Israel dejó en libertad a 180 presos palestinos, mujeres y niños en su casi totalidad.
El acuerdo también incluyó el ingreso de ayuda humanitaria, combustible y suministros médicos a la Franja de Gaza, donde viven 2,3 millones de personas.
En las últimas horas, el Ejército israelí también mató a un niño de ocho años, Adam al Ghul, y a otro de 15, Basem Abu el Wafa, en Yenín, una ciudad al norte de Cisjordania, territorio ocupado por el Estado hebreo.
(Sputnik)
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