El Gobierno de Venezuela tomó nota de las deliberaciones durante la Conferencia Internacional realizada este martes en Colombia y reiteró la necesidad de levantar las sanciones y medidas coercitivas unilaterales, ilegales y lesivas del derecho internacional.
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Un comunicado del ministerio para las Relaciones Exteriores indicó que las acciones punitivas constituyen “una agresión” a toda la población venezolana y obstaculizan el desarrollo de la vida económica y social del país.
Reclamó, en ese sentido, la devolución de los activos pertenecientes al Estado venezolano y que fueron ilegalmente retenidos por países e instituciones financieras extranjeras.
Venezuela insistió que el camino para avanzar en el diálogo político pasa por el “cumplimiento a cabalidad” del compromiso alcanzado en la Mesa de Negociación en México, en noviembre pasado, para la creación de un Fondo Social, destinado a inversiones en salud, educación, servicios públicos y mitigación de riesgos.
En esa fecha, la delegación oficial del Ejecutivo venezolano y la autodenominada opositora Plataforma Unitaria rubricaron un documento por el monto de 3.200 millones de dólares, que serían empleados en la asistencia social.
El texto de la Cancillería demandó también la “inmediata liberación” del diplomático venezolano Alex Saab, injustamente detenido en Estados Unidos.
La nota precisó que está demostrado que el desarrollo de un país, su pueblo e instituciones constitucionales y democráticas, “no se puede realizar bajo constante agresión, coerción y amenaza”. La República Bolivariana manifestó que cree en la diplomacia de paz, la cual se construye, dijo, sin agresiones, con respeto y en condiciones de igualdad.
Subrayó que solo así se pueden edificar relaciones constructivas, de cooperación y beneficio mutuo entre todos los pueblos del mundo.
La Cumbre en Colombia
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, inauguró este martes en Bogotá la Conferencia Internacional sobre el proceso político en Venezuela.
En su discurso para instalar la conferencia, el mandatario trazó una breve historia de la construcción democrática en América con sus fallas y avances, además hizo énfasis que la región no puede ser un espacio de sanciones, en referencia a los bloqueos impuestos por Estados Unidos a Venezuela, Cuba y Nicaragua.
El jefe de Estado colombiano expresó sus deseos de que la cita logre proponer los caminos para que Venezuela encuentre las respuestas adecuadas sobre su destino político.
En el Palacio de San Carlos, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, recomendó que Venezuela reingrese al Sistema Interamericano de Derechos Humanos al mismo tiempo pidió que se construya un cronograma para levantar las sanciones económicas contra Caracas.
"América no puede ser un espacio de sanciones, América tiene que ser un espacio de libertades y América tiene que ser un espacio de democracia", expresó Petro.
Petro consideró que el trabajo que harán los representantes diplomáticos en Bogotá, además de conseguir soluciones para Venezuela, debe definir si toma una ruta para el proceso de reconciliación, convivencia, de unión y paz en la región, a través de la reconstrucción democrática de toda América Latina, o continúa en el camino de la división, el conflicto y la guerra.
La conferencia tiene el propósito de propiciar un espacio que permita la reanudación del diálogo entre el Gobierno de Venezuela y sectores de la oposición.
Participan por Latinoamérica representantes de Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Chile, Honduras, México y San Vicente y las Granadinas, además de Türkiye y Sudáfrica.
Asimismo, están invitados representantes de Alemania, España, Francia, Italia, Noruega, Portugal y el Reino Unido y el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Unión Europea.