La semana pasada el Mides anunció su plan de acción orientado a las personas en situación de calle que se ven imposibilitadas de realizar la cuarentena porque no tienen donde. Tampoco tienen recursos de higiene y se trata de una población de riesgo debido a sus condiciones de vida y a la situación sanitaria de la mayoría.
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No se informó un paquete de medidas, como era esperable, sino un par de soluciones destinadas a una pequeña porción de esa población. Con respecto a lo más importante, el techo, se señaló que los refugios nocturnos albergarían a la gente durante 24 horas, pero solo a aquellos mayores de 60 años. El resto seguirá en la calle expuesto al virus por tiempo indeterminado.
Esta medida se complementó con una bandeja alimentaria diaria y un aumento de la cuota de la tarjeta Uruguay Social que el Mides viene entregando como prestación social a la gente en situación de calle.
Las personas que se encuentran en la calle, reclaman que las medidas son insuficientes y que no amparan a la mayoría de ellos. Así lo transmitieron mediante un comunicado difundido en las redes sociales del colectivo Ni Todo Esta Perdido (Nitep).
Bajo la consigna «No somos invisibles» el colectivo manifestó que «no se están dando las garantías sobre las medidas que están tomando con el virus y nosotres. Aún seguimos en calle y sin uso de siquiera un baño. La solución que se ha implementado ha sido la de 300 personas mayores que están en refugios; la realidad es que somos más 2038 personas en situación de calle (usuarios de refugios y personas que viven en calle)».
Reconocieron que se habló sobre propuestas como el uso de las plazas deportivas, pero por ahora se trata solo de un conjunto de intenciones. «La realidad es que siguen sin ser habilitadas y seguimos no solamente expuestos al virus, sino también al buen uso de las necesidades básicas que tiene cualquier ciudadano(higiene, baño, agua…)», agrega el comunicado.
A entender de estas personas, el hecho de que no existan soluciones concretas para la problemática que padecen, «evidencia la discriminación a un grupo de personas priorizando la atención a otras». Asimismo, se preguntan «cuál es la razón de este tratamiento diferente para humanos que forman parte de una misma sociedad y donde todes estamos conviviendo. ¿Ni siquiera nos hermana la desgracia?»
Este colectivo se encuentra preocupado ante la eventual posibilidad de que se decrete una cuarentena nacional obligatoria y ellos siguen sin tener un lugar donde poder hacerla.
Caras y Caretas Portal dialogó con uno de los voceros del colectivo Nitep, Mauricio De los Santos,quien supo vivir en la calle, logró salir de esa situación y actualmente trabaja en conjunto con abogados de DDHH en el armado de un proyecto de ley sobre situación de calle.
«La verdad es que las medidas tomadas por parte del gobierno aún están lejos de cubrir la necesidad de esta población. Según el mides, la prioridad la tienen unas 300 personas mayores de 60, pero en realidad son más 2000 personas que se encuentran en situación de calle (entre usuarios de refugios y gente que vive en calle)».
A su entender, tomaron una medida en la cual no están amparadas la mayoría de las personas que viven en la calle. «Falta que se tenga en consideración al resto de la población porque no somos inmunes al virus».
Por otro lado, señaló que el Mides también anunció una recarga extraordinaria en las tarjetas, pero que aún no fue depositada. «Eso solo le sirve a aquellos que tienen un hogar y están en situación de vulnerabilidad».
«No hay una solución, y queremos respuestas concretas y efectivas», concluye el comunicado.