El acuerdo para alcanzar un juicio abreviado entre el expresidente de la Ursec, Gabriel Lombide y el fiscal Diego Pérez, lleva de fondo denuncias por presiones de parte del representante del Ministerio Público, quien ha insistido a imputados para que lleguen a un acuerdo. El acuerdo alcanzado entre el fiscal Pérez y Lombide incluyó una rebaja de su pena de más de 3 millones de pesos a 60 mil pesos. Además, el fiscal le hizo admitir a Lombide que la radio Palmitas interfería con otra, punto que jamás sucedió.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARMECaras y Caretas Diario
En tu email todos los días
En la última audiencia de esta semana de control de acusación, donde Fiscalía y defensa luchan para que determinadas pruebas sobrevivan para poder utilizarlas en la siguiente etapa de juicio oral, la jueza penal Adriana Chamsarian dio plazo hasta el 19 de octubre para que las partes acuerden sobre determinadas pruebas en las que no mantienen discusión de fondo para que luego, en la siguiente audiencia de control de acusación, sigan intercambiando sobre los medios probatorios en los que existe verdadera controversia. Este martes la fiscalía de Flagrancia de 5to Turno, a cargo de Diego Pérez, alcanzó finalmente un acuerdo con el expresidente de la Ursec, Gabriel Lombide, quien desempeñó funciones en ese organismo entre 2015 y 2020. Lombide llegó a un acuerdo admitiendo el delito de abuso de funciones que incluye 12 meses de libertad vigilada, 2 años de inhabilitación para ocupar cargos públicos y una multa de 40 unidades reajustables equivalentes a unos 60 mil pesos, aunque originalmente se trataba de una multa de 2.000 unidades reajustables. El expresidente de la Ursec admitió, para alcanzar el juicio abreviado, que “al ordenar la devolución de equipos a la radio comunitaria Palmitas provocó de forma tácita que la radio pudiera funcionar” cuando en realidad había veda y no podía hacerlo. Las fuentes consultadas por Caras y Caretas conocen que la Ursec actuó en función de la información que tenía en ese momento y que nada se alejó de las normas ni del derecho porque, en conocimiento de una inspección ilegal en la radio, las autoridades resolvieron lo que se debía: retrotraerse en los efectos a los momentos anteriores a realizarse esa inspección.
Lombide está jubilado y por tanto no pretendía ocupar ningún otro cargo público. Además, la libertad vigilada no le afecta, porque su estado de salud no permite que salga de su casa frecuentemente. El fiscal Pérez lo había imputado porque lo acusó de ordenar la devolución de los equipos a la radio Palmitas en veda electoral. Fuentes de la investigación señalan que “la radio ubicada en Soriano se presentó durante la veda electoral del año 2014. Con la información obtenida en ese momento pensamos que la inspección realizada había sido ilegal y por eso devolvimos los equipos a la radio para evitar un daño mayor al Estado, evitando que la empresa iniciara una demanda”, dijo una fuente consultada.
El fiscal Diego Pérez “presiona desde el año 2022 a los actores de este proceso, pero especialmente ha presionado a Lombide -quien padeció un ACV en el medio y que ahora llegó a un juicio abreviado- y al exgerente general de la Ursec, Óscar Mecol”. “El acuerdo es obvio que es bajo presión, porque Pérez dice que todo este asunto de esta radio empezó con una interferencia que estaba sufriendo la frecuencia 92.1, y esta radio Palmitas es frecuencia 99.5; es físicamente imposible que la interfiera”. Según conoció Caras y Caretas, el expresidente de la Ursec, Gabriel Lombide, quiso rectificar algunos aspectos del acuerdo para el juicio abreviado y el fiscal no se lo permitió. De hecho, la frecuencia de la radio Palmitas no interfería con ninguna otra -según las fuentes consultadas-, y sin embargo en el acuerdo del juicio abreviado alcanzado por Pérez con Lombide, así se describe. En esta causa, el fiscal Pérez acusó al exdirector de la Ursec, Nicolás Cendoya, de tres delitos de abuso de funciones: el primero por reunirse con el exsecretario del organismo, Óscar Mecol y por su reunión con Gustavo Sorrentino, funcionario subordinado a Cendoya. El fiscal Pérez comenzó investigando a Sorrentino por la trituración de papeles o documentos pero, en setiembre pasado y a tres años de haber recibido una bolsa de papeles triturados imposible de reconstruir, Caras y Caretas pudo conocer que el fiscal comunicó en audiencia su decisión de no incluir en su acusación al asunto de la trituración de papeles que tantas veces, en forma pública, había insistido como el origen de la denuncia de la Ursec. Es más, Pérez ni siquiera formalizó al funcionario que trituró ese material, pero, al mismo tiempo, también ha manifestado en las audiencias de control de acusación, según pudo conocer Caras y Caretas, que lo seguirá investigando. El fiscal fue denunciado por la abogada Cecilia Salom, quien elevó la denuncia al fiscal de Corte Juan Gómez por desacato y abuso de funciones presuntamente cometidos por el representante del Ministerio Público.
Incautación de equipos
En 2014, el Poder Ejecutivo advirtió que no se podía autorizar la frecuencia de esta radio comunitaria porque regía veda electoral a la fecha del trámite de regularización de la radio. La veda electoral regía para esta actividad hasta el 26 de abril de 2015 y por ello la finalización del trámite ocurrió el 6 de julio de ese año. Por eso, el directorio de Ursec instruyó al gerente de ingeniería de Telecomunicaciones, Leslie Green, a no inspeccionar radio Palmitas hasta que el Ministerio de Energía solucionara su regularización, de modo de no causar daño ilegítimo. Sin embargo, Green no transmitió la orden a los inspectores y el 25 de febrero de 2015 inspectores de la Ursec incautaron los equipos.
Ese mismo día, Lombide y Cendoya, por resolución de directorio, ordenaron devolver los equipos incautados a la radio comunitaria, cumpliendo con la ley 18.232 que imponía a las autoridades de Ursec promover y proteger la radiodifusión comunitaria. En Palmitas no había otra radio. Con la decisión de devolver los equipos, el directorio del organismo buscó evitar causar un daño ilegítimo a una radio comunitaria que había cumplido con todos los requisitos de regularización.