“Ante los intentos de fusionar nuestra colectividad en un lema común en octubre de 2029 afirmamos radicalmente: no estamos dispuestos a perder nuestra identidad. No porque rechacemos la unidad nacional, sino porque la democracia necesita pluralidad de voces, partidos fuertes y auténticos que representen ideas claras”, dice. Y agrega: “Disolvernos en un molde único sería apagar la llama batllista y renunciar a una tradición republicana que siempre buscó transformar la realidad del país”.
“Sostenemos con convicción el sistema de balotaje. No es un detalle menor: es la herramienta que asegura que las mayorías se construyan con el voto de la ciudadanía entera y no con pactos de despacho entre dirigentes. Es un mecanismo que obliga a la política a abrirse, a explicar, a convencer, a hablarle a todo el Uruguay y no a un pequeño sector. Allí, en la segunda vuelta se prueba de verdad la capacidad de un proyecto de convocar al país entero”, señala este grupo de colorados.
Diferentes visiones políticas
El senador Andrés Ojeda, secretario general del partido, defiende que se teja una alianza en todo el país para las elecciones departamentales pero duda sobre al conveniencia de un lema único en octubre de 2029. Por su parte el senador y ex ministro Pedro Bordaberry, advierte que “angostar la oferta electoral puede provocar efectos negativos sobre la posibilidad de éxito electoral”. A su vez, el intendente nacionalista de Paysandú, Nicolás Olivera, entiende que “lo que no puede suceder es que se desnaturalice cada partido”.
“El Partido Colorado vuelve a abrirse a la participación de todos, buscaremos la constitución de asambleas locales departamentales y nacionales”, (...) le devolveremos el camino de participación política que José Batlle y Ordóñez abrió para que cualquier idea, cualquier ciudadano del Uruguay, pueda incidir”, culmina la declaración.