De un pedido de informes realizado por la oposición (Frente Amplio) y según denunció también el expresidente de la delegación uruguaya en Salto Grande Gabriel Rodríguez, se desprendía que al 1º de abril de 2020 la plantilla de empleados de la delegación uruguaya en la CTM era de 235 y al 31 de julio de 2021 ascendió a 260, un aumento de casi el 11% a pesar de jubilaciones y prejubilaciones.
Entre junio de 2020 y julio de 2021, hubo 26 designaciones directas en el organismo, con salarios que rondaban iban entre $ 83.487 a $ 292.000.
Nuevas autoridades
Este jueves asumieron las nuevas autoridades de la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande que será encabezada por el presidente Gonzalo Casaravilla, extitular de UTE de los últimos dos gobiernos del Frente Amplio.
Casaravilla dijo que “es un desafío técnico, regional y humano” estar al frente de la CTM. El jerarca señaó que s bien Salto Grande “hace como 45 años que viene funcionando muy bien, llegó el momento de la renovación”, ya que las máquinas “están necesitando hacerle un mantenimiento mayor”. Por lo tanto, están encarando, “en un proceso que va a llevar más de una década, la renovación de todas las turbinas de la represa, lo cual es un desafío enorme desde el punto de vista técnico”.
Posteriormente Casaravilla arremetió contra la administración anterior. Dijo que “la imagen de CTM está dañada, y eso es un tema complejo, porque tiene que ver con la percepción de la gente, pero hay que trabajar”. Agregó que “no hay antecedentes” de que renunciara el presidente de la CTM en Uruguay, como sucedió en 2023 en referencia al nacionalista Carlos Albisu.
“No vamos a hacer clientelismo político, porque no corresponde. Y tampoco vamos a generar ingresos o ascensos sin procesos transparentes y competitivos. Tenemos que jerarquizar la gestión y el ingreso equitativo, para todos los connacionales. En Salto Grande tenemos puestos que son para uruguayos y para argentinos”, señaló.
Por último, el jerarca dijo que tampoco van a “dilapidar los recursos del país”, porque al final del día, cada decisión que tiene un impacto económico, “es plata de los uruguayos y argentinos”. “Nosotros gestionamos el dinero de los uruguayos, tenemos la responsabilidad de hacerlo en forma eficiente y transparente. Es, en definitiva, el ABC de la gestión. Si hacemos todo eso, podemos recuperar esa imagen que hoy está dañada y que espero que podamos recuperar”, finalizó.