Según Sánchez, el “camino responsable” fue iniciar las acciones correspondientes y denunciar el documento firmado por la anterior administración. “La informalidad con la que se manejó Cardama y el gobierno pasado es la que nos trajo estos problemas”, afirmó.
El secretario también apuntó a la reacción del Partido Nacional, que respaldó los cuestionamientos de Lacalle Pou a la decisión de Orsi. “¿No van a respaldar esta decisión? ¿No les parece razonable? ¿No es una decisión que protege al Estado?”, se preguntó y agregó que en lugar de atacar políticamente al presidente, “deberíamos estar todos defendiendo la resolución que salvaguarda los intereses del país”.
Los abogados de Cardama
En cuanto a las declaraciones del expresidente, Sánchez consideró que fueron “muy jugadas” y “más propias de un abogado de Cardama que de un exmandatario uruguayo”. “Lo que esperaba de la conferencia del Partido Nacional era una explicación razonable de por qué aceptaron esta garantía y por qué no hicieron los controles”, afirmó.
Sánchez aseguró además que Lacalle Pou fue “arrastrado a una operación política” para convertir el tema en un cruce personal con Orsi. Frente a la acusación del exmandatario de que el actual gobierno busca “destruir lo que encontró”, Sánchez respondió: “Cuando me dicen que estoy destruyendo... No se puede destruir lo que no existía. Si hay algo que no se puede destruir es el humo”.
También calificó de “agraviantes” los dichos de Lacalle Pou hacia el presidente Orsi. “Cruza con mucha dureza. Pusieron en riesgo al país cuando aceptaron una garantía inexistente de una empresa trucha”, remarcó.
Mientras tanto, Lacalle Pou insistió en que llamó a Orsi para que “reevalúe” la decisión y defendió la gestión de su administración. Pero desde la Torre Ejecutiva, la posición de Sánchez fue clara, el gobierno considera que la denuncia del contrato era la única forma de proteger al Estado de un acuerdo que nació viciado y sin sustento real.