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Sociedad homicidio | Shangrilá | anciana

Horror

El bastón ensangrentado y el pozo: la pista que confirmó el homicidio de Gilda, la anciana de Shangrilá

La mujer estaba enterrada en su propia vivienda, luego de que se cometió el homicidio los autores trataron de engañar a la Policía.

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El caso de Gilda, la mujer de 84 años desaparecida desde el pasado sábado en Shangrilá, Canelones, culminó trágicamente este jueves con el hallazgo de su cuerpo enterrado en el predio de su propia casa. Las autoridades confirmaron que se trató de un homicidio, lo que derivó en la detención de la nieta de la víctima, de 30 años, y su pareja. Además, otras dos personas se encuentran en calidad de indagadas: el hermano de la pareja y un hombre que alquilaba una casilla en el terreno.

La investigación, a cargo del fiscal Ignacio Montedeocar, estableció que Gilda fue asesinada a golpes en la cabeza con un objeto contundente. Las pericias iniciales indican que el impacto le provocó un sangrado masivo que le causó la muerte a los pocos minutos. Posteriormente, su cuerpo fue enterrado en el mismo predio de la vivienda, un punto al que la Policía logró llegar gracias a la declaración de uno de los implicados que se presentó ante las autoridades.

Las pistas del homicidio

Si bien la nieta fue quien radicó la denuncia de desaparición el pasado martes, su testimonio generó dudas inmediatas en la Policía. La teoría del homicidio se confirmó rápidamente tras hallar en la vivienda rastros de sangre y el bastón de la víctima “bañado en sangre”. La anciana convivía en el domicilio con su nieta, la pareja de esta y el inquilino. Según relatos de vecinos, Gilda vivía con temor hacia estas personas, quienes eran consumidoras de drogas, e incluso había colocado una reja en su dormitorio para protegerse.

La Fiscalía maneja la hipótesis de que el móvil del crimen podría haber sido el robo para obtener dinero para la compra de estupefacientes, dado que tanto la nieta como su pareja son adictos. Asimismo, se estima que la casilla alquilada en el terreno era frecuentada por consumidores y podría ser un punto de venta de droga. Por el momento, las autoridades se centran en establecer el rol de participación exacto de cada uno de los cuatro implicados en el homicidio y el posterior ocultamiento del cuerpo.

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