En una acción conjunta entre la Interpol y el Departamento de Investigación de Delitos Financieros de la Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado (Dglcco), en colaboración con la Fiscalía Departamental de Rivera de 2° Turno, se llevó a cabo la operación "Madrox" que resultó en el esclarecimiento de estafas por un monto total de tres millones de pesos.
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La investigación, que se desplegó a lo largo de 2021 y culminó en la detención de doce individuos, arrojó luz sobre una serie de 122 denuncias presentadas desde diciembre de 2020 en todo el país. Estas denuncias estaban relacionadas con un patrón de estafas que involucraban el ofrecimiento de préstamos a través de redes sociales, utilizando una elaborada publicidad diseñada para engañar a las víctimas.
Los estafadores operaban bajo la fachada de empresas legítimas, utilizando logotipos, direcciones comerciales y números de contacto para generar confianza.
La táctica de los estafadores consistía en dirigirse a personas con antecedentes de malos pagadores, ofreciéndoles préstamos de grandes sumas sin requerir garantías. Una vez que las víctimas mostraban interés, les solicitaban información personal completa, incluyendo documentos de identidad y recibos de sueldo, simulando el proceso de gestión del préstamo. Les enviaban contratos falsificados con membretes y logotipos aparentemente auténticos, respaldados por supuestos asesores legales.
La estafa se profundizaba cuando se pedía a las víctimas que realizaran giros de dinero para cubrir gastos administrativos y timbres, prometiendo que el dinero sería reembolsado una vez que se depositara el préstamo. Estos giros se dirigían a números de documentos de identidad y cuentas bancarias proporcionadas por los estafadores.
Luego de recibir el primer giro, continuaban solicitando más dinero bajo diferentes pretextos, repitiendo el proceso varias veces.
La investigación reveló que esta operación fraudulenta era llevada a cabo por una organización delictiva compuesta por individuos que mantenían estrechos vínculos de parentesco y amistad. Algunos miembros de la organización eran responsables de ejecutar las estafas, mientras que otros actuaban como cobradores, recibiendo los giros de dinero de las víctimas y enviando parte de los fondos al extranjero.
En última instancia, se determinó que los estafadores lograron apoderarse de aproximadamente tres millones de pesos a través de estas maniobras fraudulentas. La operación "Madrox" culminó con la detención de doce personas en diversos departamentos del país, quienes enfrentaron condenas por su participación en esta trama.